«Los perros» en la Semana de la Crítica de Cannes 2017
Para su segundo largometraje de ficción, la directora chilena Marcela Said, quien ya presentó en este festival en 2013 su opera prima “El verano de los peces voladores”, ha escogido un tema que traerá sin duda controversia en Chile, pues constituye una enérgica denuncia de la impunidad que gozan los grandes burgueses que colaboraron con la sangrienta dictadura de Pinochet.
A través de un turbio y complejo personaje de mujer, Mariana, una cuadragenaria, niña mimada de una rica familia, frustrada en su relación matrimonial, muestra Marcela Said su atracción por un maestro de equitación, excoronel del ejército, cuyo pasado oscuro y criminal vamos a ir descubriendo a medida que progresa la trama.
Un personaje femenino cuyas pulsiones están siempre en relación con la autoridad que esa sociedad patriarcal le ha impuesto, a través de los cuatro personajes masculinos: su padre, su marido, el policía o el coronel, esos perros a los que alude el titulo y que le dan órdenes a diestro y siniestro. Pero perros reales también los de su propiedad que aparecen misteriosamente muertos, como reflejo de una violencia latente o de un deseo de revancha en la sociedad contra los militares asesinos, brazo armado de la dictadura.
Películas como “Portero de noche” de Liliana Cavani, o “La pianista” de Michael Haneke, han inspirado a Marcela Said en la construcción de esta relación entre morbosa y perversa. Atraída por ese hombre autoritario y taciturno, Mariana descubre con estupor su pasado y las implicaciones de su propio padre en los hechos que se le imputan.
El origen de este guion fue un encuentro de la cineasta con el excoronel Juan Morales, durante la realización de su primer largometraje documental “El mocito”. Morales es un personaje real que ejercía de maestro de equitación en Santiago y estaba acusado de crímenes de lesa humanidad, siendo después condenado a cadena perpetua, su historia ha alimentado el personaje del coronel en la ficción.
El personaje del padre de Mariana está inspirado en parte en el propio padre de la realizadora, según lo explicó Marcela Said. “Está inspirado en mi padre, y en el de otra amiga mía y en otros personajes reales que conozco, es esa burguesía que se enriqueció con la dictadura y que goza hoy de total impunidad”.
Marcela Said ajusta cuentas pues con la hipocresía de esa sociedad chilena neoliberal, que dejó hacer el trabajo sucio a los militares. “El terror en mi país existió para instalar un sistema económico neoliberal. Los Estados Unidos, como la burguesía chilena son responsables de lo sucedido” añade Marcela Said
Dos excelentes actores chilenos, Antonia Zegers y Alfredo Castro, interpretan los inquietantes y turbios papeles de Mariana y del coronel. A ambos los recordarán por algunas conocidas películas de Pablo Larrain, como “Post mortem”, “No”, o “el Club”.
Recordemos que Alfredo Castro era también el protagonista de “Los amantes de Caracas” del venezolano Lorenzo Vigas, película ganadora del León de Oro en 2015 en el festival de Venecia.