Festival Internacional Cante de las Minas de La Unión, domingo 14 de agosto de 2016, por segundo año consecutivo el premio Bordón Minero que se concede a la guitarra ha quedado desierto. Ha ganado la Lámpara Minera al cante la malagueña Antonia Contreras; el premio Desplante al baile se lo ha llevado Belén López nacida en Tarragona y el premio Filón a instrumentistas el pianista jienense Alfonso Aroca.
Han sido veinticinco semifinalistas, la inmensa mayoría procedentes de provincias andaluzas. Murcia, Madrid, Extremadura, Cataluña y Toulouse (Francia) también han estado ahí. Los semifinalistas llegan al concurso tras una criba que empieza en el mes de marzo, de candidatos a presentarse al más prestigioso concurso de flamenco que hoy por hoy existe en España.
Para aspirar a los premios mayores es condición sine qua non llegar a semifinales con un programa que incluya una Minera en el cante; un Taranto en el baile, una Taranta en guitarra y también Taranta en instrumentistas. Los que llegan a semifinales sin reunir este requisito pueden aspirar a premios menores, por cantes, toques o bailes de otros palos.
Se puede ganar un premio mayor y otros menores, como ha sucedido este año con la ganadora de la Lámpara Minera, Antonia Contreras, que también ha ganado premios por malagueñas, granaínas y mineras. El premio Lámpara Minera es el mejor dotado económicamente, 15.000, euros. El Desplante con 9.000,- y el Filón con 6.000,-
Ningún semifinalista de los cuatro de guitarra ha merecido llegar a la final, en palabras de uno de los miembros del jurado, ninguno ha mostrado suficiente nivel en las noches de semifinales. Cabe preguntarse cómo han llegado a semifinales, o que el nivel para situarse en semifinales sea muy inferior al que se exige para meterse en la final. Y por lo menos uno de los cuatro, Agustín Carbonell El Bola, de familia con tradición flamenca donde las haya y un currículo como guitarrista y compositor, nacional e internacional, de llevar su música por más de veinte países y cinco continentes, grabaciones, premios y reconocimientos, trabajos con todos los grandes del país, Habichuelas, Farruco, Fernanda de Utrera, Manuela Carrasco, Enrique Morente, Jorge Pardo, Chano Dominguez y etcs….Agustín tiene cuarenta y nueve años, es decir le avala toda una vida dedicada exclusivamente al arte, pero se ve que no suficiente para ser finalista del concurso del Festival Internacional del cante de las Minas de La Unión.
Las ganadoras
Sin duda Antonia Contreras fue la mejor, la más completa, en semifinales y compitiendo en la final por el premio mayor con una cantaora tan reconocida como Amparo Heredia La Repompilla, que cuenta con una formación y currículo más internacional que nadie, una voz envidiable y admirablemente gestionada. Antonia solo la ganó en pasión y señorío. A Esther Merino Pilo de Badajoz, la ganó desde la tercera noche de semifinales y en la final.
Pasaron a la final de baile, la ganadora oficial, la catalana de origen andaluz Belén López y la ganadora in pectore para muchos, Anabel Veloso. Eran en justicia las únicas que merecían pelear por el Desplante. Las dos con currículos muy importantes, bastante parejos. La verdad, el premio a Belén López ha sido cuando menos opinable, perfectamente intercambiable con el premio obtenido por la almeriense Anabel Veloso en segunda clasificación. Personalmente interpreto que el baile de Anabel Veloso integra de forma muy superior las sintonías corporales, gestuales y pasionales en su baile.
Los dos instrumentistas que pasaron a la final, el pianista jienense Alfonso Aroca y el flautista cordobés Sergio de Lope se llevaron respectivamente el premio Filón y el segundo premio.
Hubo en semifinales un joven pianista de veintisiete años nacido en Toulouse, Rafael Pradal, hijo de músico y compositor y de cantaora, nieto del pintor almeriense Carlos Pradal, que tuvo una excelente actuación en semifinales. ¿No había un premio a segundo pianista clasificado?
Volviendo a la guitarra desierta. Puede que Agustín Carbonell no mereciera esa noche entrar en la final. Pero el jovencísimo Didier Macho, gaditano de 19 años, quien tuvo una más que meritoria actuación en semifinales, merecía un premio revelación, joven, o como quieran llamarlo. No hubiera sido la primera vez que recibía un premio, de hecho ya ha recibido premios en otras cuatro ocasiones, la primera en 2013, con dieciséis años, por la Junta de Andalucía.
Es que dos años consecutivos de guitarra desierta, hacen pensar que para los jurados del Festival Internacional del Cante de las Minas, no hay guitarristas de nivel en España. O que los que lo tienen no se presentan, por la razón que sea.