Según la Organización Mundial de la Salud, (OMS), se considera que existen alrededor de 800 millones de personas con discapacidad y por tanto, el acceso de estas personas a la tecnología debe tenerse en cuenta a la hora de la construcción de una sociedad igualitaria. Las pautas son una especificación del World Wide Consortium, (W3C) y mediante ellas podemos ver en una guía la accesibilidad los sitios web creados para las personas con discapacidad. Las limitaciones que conforman la accesibilidad pueden ser visuales, motrices, auditivas o cognitivas. En términos de accesibilidad incluimos también a las personas mayores cuyos problemas físicos muchas veces son excluidos del campo de la tecnología.
Hay apps que permiten comunicarse y manejar los dispositivos móviles en igualdad de condiciones a las personas con discapacidades sensoriales, denunciar la violación de un derecho, encontrar un aparcamiento accesible o posibilitar a las familias localizar a una persona con discapacidad intelectual y asegurarse de que está bien. En este sentido, la encuesta revela que un 60% de las personas con discapacidad son usuarios de estas Apps más específicas, siendo los que más las emplean los que tienen discapacidad visual (77%), seguidos de los que tienen discapacidad auditiva (73%), física (65%) e intelectual (50%).
El informe publicado en el Día Internacional de las Tecnologías Apropiadas asegura que la tecnología cuyo objetivo es resolver problemas, pone especial énfasis en los criterios éticos, culturales, sociales y económicos de la comunidad a la que dan servicio. En dicho informe de tecnología y discapacidad se ha analizado el impacto que las nuevas tecnologías tienen en la calidad de vida de las personas con discapacidad y en la plena inclusión de las mismas. Por ello, las aplicaciones móviles han supuesto una revolución en sus respectivas vidas ya que no solo utilizan los teléfonos inteligentes sino que las apps que se han descargado simplifican sus rutinas y dan servicios concretos a las personas con discapacidad permitiéndoles normalizar en muchos aspectos su vida.
El creciente uso de las Nuevas Tecnologías por parte de las personas con discapacidad hace que puedan normalizar cada vez más sus rutinas, en un entorno eminentemente tecnologizado, en el que la tecnología se ha convertido en un factor de inclusión social. Por ello, no es de extrañar que un 84% de personas con algún tipo de discapacidad declare que su calidad de vida global ha mejorado gracias a las nuevas tecnologías.
Entre las apps más descargadas existen aquellas que ayudan a la discapacidad visual, a la sordera a la hora de ver cine o teatro accesible, las apps que permiten escuchar o narrar lo que se va viendo, otras que permiten ver los sitios accesibles, otras que garantizan leer o escuchar libros, etc, etc. Es importante también ajustar la accesibilidad tanto en el teléfono como en los ordenadores para poder navegar de acuerdo con la discapacidad que se tenga. Mediante este ajuste, la navegabilidad mejorará y también la accesibilidad de los sitios web.