La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) ha respaldado este martes 22 de marzo de 2016 “la plena vigencia del Estado Democrático de Derecho y el ejercicio de las potestades del Poder Ejecutivo brasileño”, informa Andes.
“Con honda preocupación hemos asistido al desarrollo de los acontecimientos políticos y judiciales que han convulsionado a Brasil en el curso de las últimas semanas. Nos alarma ver la estabilidad democrática de su patria amenazada”, señaló la secretaria ejecutiva del organismo de las Naciones Unidas, Alicia Bárcena, en un mensaje público dirigido a la presidenta brasileña Dilma Rousseff.
Dijo que tanto el mandato del expresidente Luiz Inacio Lula Da Silva como el de Rousseff se han traducido en “gobiernos comprometidos con la justicia y la igualdad” basados en la legitimidad que les otorgó la soberanía popular.
“Nunca, en la historia de Brasil, tantas y tantos de sus compatriotas habían logrado sortear el hambre, la pobreza y la desigualdad. Significativa es también para nosotros la huella determinante con la que sus gestiones reforzaron la nueva arquitectura de la integración de nuestra región, de la Unasur (Unión de Naciones Suramericanas) y Celac (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños)”, añadió.
Aseguró conocer el esfuerzo del gobierno brasileño por “perseguir y castigar la cultura de prácticas corruptas que han sido históricamente la parte más opaca del vínculo entre los intereses privados y las instituciones del Estado” y elogió su esfuerzo en la creación de una legislación más exigente.
“Es por ello que nos violenta que hoy, sin mediar juicio ni pruebas, sirviéndose de filtraciones y una ofensiva mediática que ya ha dictado condena, se intente demoler su imagen y su legado, al tiempo que se multiplican los empeños por menoscabar la autoridad presidencial e interrumpir el mandato que entregaron en las urnas los ciudadanos”.
Bárcena anunció que los acontecimientos por los que atraviesa Brasil “resuenan con fuerza más allá de sus fronteras” e ilustran “los riesgos y dificultades a los que aún está expuesta nuestra democracia”, en América Latina.