Las Conferencias Episcopales de América Latina, África y Asia, coordinadas por la Pontificia Comisión para América Latina, han presentado un documento a la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP30) en el que denuncian las «falsas situaciones climáticas» y llaman urgentemente a la «conversión ecológica».

El documento, con el conocimiento del papa León XIV, ha sido liderado por el arzobispo de Porto Alegre, el cardenal Jaime Spengler: «Levanto una voz que no es solo mía, sino de los pueblos amazónicos, de los mártires de la tierra, de las comunidades indígenas, afrodescendientes y campesinos que cuidaron la vida en medio de las amenazas».
En el texto se propone una transición «justa, popular y comunitaria» centrada en las comunidades, las mujeres y los jóvenes.
Por su parte, la Iglesia de la República Democrática del Congo a dicho no a los «minerales de sangre» ante la extracción ilegal de los recursos mineros, especialmente el cobre y el cobalto.
El cardenal Pietro Parolin, secretario de estado del Vaticano, leyó un mensaje de León XIV en la cumbre de líderes de la COP 30, en el que afirmaba: «Si quieres construir la paz, protege la Creación»; en la convicción de que cuidar de nuestra casa común es un deber moral y un camino hacia una paz duradera. Parolín desarrolla una intensa política exterior, primero con el papa Francisco y ahora con León XIV.
Los obispos pan-amazónicos reafirman el compromiso con los pueblos indígenas y afirman la necesidad de justicia socioambiental, en la línea también de la «Laudatio si» (2015) del papa Francisco. La presencia de la Iglesia en la Amazonia es un freno para quienes quieren invadir y explotar este territorio, en el que es muy activo el narcotráfico.
Además, en la COP 30 se ha producido un interesante diálogo entre sectores privados, la Iglesia y las comunidades en un evento titulado «Diálogo Socio-Ambiental por la Paz: Adaptación y Transición Justa».
Participaron, entre otros, Leonardo Steiner, arzobispo de Manaos y figura central del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), Eduardo Agosta, especialista en ecología y asesor del papa Francisco o Emilde Cuda, secretaria de la Pontificia Comisión para América Latina. En dicho diálogo se destacó la influencia de la Encíclica «Laudatio si» así como el artículo 12 del Acuerdo de París orientado a la educación y sensibilización sobre el cambio climático.
Cuda recuperó la doctrina social de la Iglesia e insistió: «No habrá justicia social hasta que todos se sienten a la misma mesa de toma de decisiones, no para contar sus dramas, sino para decidir».
En definitiva, la voz del papa Francisco ha resonado en la COP 30: «Quiten las manos de la Amazonía. Están depredando la Amazonía. Y no son los amazónicos. No son los pueblos indígenas, no lo son».



