CaixaForum Madrid expone las últimas obras del pintor tinerfeño
“En mi trabajo lo esencial es la esencia de la luz… La esencia de la luz es deslumbrante, es una luz de una claridad, de una intensidad como si fuera esta luz el mensaje que esperábamos de Dios”. Así define su obra el pintor Cristino de Vera en la entrevista realizada por el periodista Juan Cruz, que se incluye en el catálogo de la exposición del artista tinerfeño que estos días puede verse en las instalaciones de CaixaForum Madrid.
Imágenes del silencio
Quince años han pasado desde que Cristino de Vera (Santa Cruz de Tenerife, 1931) expusiera públicamente su obra pictórica en el Museo Arqueológico Nacional. Tal vez por esta circunstancia el artista ha decidido bautizar esta muestra con el título de “Al silencio”, como si fuera una dedicatoria no sólo al concepto mismo de silencio, presente a lo largo de toda su obra, sino también a este periodo de mutismo al que puede seguir otro definitivo, ya que el artista ha manifestado que quizá sea ésta su última exposición.
La muestra consta de veintiocho pinturas realizadas entre 1995 y 2013 y dieciocho dibujos a tinta china, más recientes. Cristino de Vera coincide con Miguel Ángel (¿o fue Da Vinci?) en pensar que, en las artes plásticas, el dibujo es lo que más se acerca a la divinidad. En la misma sala que alberga todas las obras se ha instalado una vitrina para mostrar publicaciones relacionadas con Cristino de Vera, y se proyecta un documental de 2005 del cineasta Miguel G. Morales sobre la obra y la figura del pintor en el que éste insiste en la búsqueda del silencio como uno de los objetivos de su pintura.
En “Al silencio” Cristino de Vera se mantiene fiel tanto a la luz como al color que han caracterizado toda su pintura (“nací en un lugar donde la naturaleza, las cosas, la vida misma, era una ecuación de luz y sombras”) y también a la figura, si bien ahora ésta se manifiesta en contornos más desdibujados (“Figura y dos coronas de flores”, 2003), lo que acentúa la espiritualidad que impregna toda su obra, presidida por la mística, que invita a la meditación contemplativa ante la soledad, el dolor, la muerte y la angustia existencial.
El artista ha definido también su obra como una búsqueda de la raíz espiritual que hay en cada uno, y en cada forma del universo. También en la búsqueda de Dios, al que finalmente confiesa haber encontrado. Detener lo fugaz, huir de la angustia en busca del remanso y el silencio como envoltura de todo. Es lo que persigue Cristino de Vera en su pintura. En las figuras femeninas solitarias, en las naturalezas muertas, en los cestos, en las copas y en las tazas a la luz de velones apagados, de las estrellas de la noche, de la luz de la tarde y en los paisajes desde la ventana, sobre los que ahora destaca el Teide como si fuera una ofrenda a su tierra. A veces son variaciones sobre un mismo motivo, al que vuelve una y otra vez, pero en cada cuadro vibra de forma peculiar cada uno de los elementos que lo componen.
- TÍTULO. “Cristino de Vera. Al silencio”
- LUGAR. CaixaForum Madrid. Paseo del Prado, 36
- FECHAS. Hasta el 5 de enero (05:01:2018)