Rafael Hernando lleva ya unas cuantas legislaturas en el Congreso de los Diputados de España, creo que seis. Tiene, por lo tanto, bien pegados los pantalones al escaño y hace muy bien su papel de asentidor tras la imagen parlante de su jefe.
Rafael Hernando, portavoz del PP en el CongresoQue su jefe Rajoy lo haya elegido como portavoz del partido -sin duda por tan resultón y reiterado asentimiento-, tras el nombramiento del anterior como ministro de Sanidad, ha obligado a revisar las hemerotecas, porque ha sido precisamente por la voz por lo que este señor ha incurrido en bochornosos y sonados dislates.
El mayor de todos ellos, con calificativo de miserable, fue sin duda -por el respeto debido siempre a los muertos y a quienes han sufrido su ausencia durante decenios sin saber donde fueron enterrados tras su asesinato-, el que propaló en el plató de 13TV (el canal de la obispalía), donde Hernando ejercía o ejerce de tertuliano y se le reían infamias como la que sigue con relación a la recuperación e identifiación de los restos de las víctimas del franquismo: “Algunos se han acordado de su padre cuando había subvenciones”.
Otras manifestaciones de las que se han acordado los medios con ocasión de la portavocía de Hernando son de esta guisa: “La gente se rasga las vestiduras ante la violencia de ciertos energúmenos cuando representan a la extrema derecha y, sin embargo, se muestra complaciente cuando los energúmenos portan banderas que en el pasado representaron a la izquierda”. Respecto a Andalucía: “Con ese balance y 1.250.000 parados, ¿no se le cae la cara de vergüenza? Íbamos a ser la California europea pero con el bipartito parecemos Etiopía”. “El resultado de 31 años de gobierno socialista andaluz y tres modernizaciones es que los niños andaluces no tienen para comer tres veces al día”. Sobre el juez Baltasar Garzón: “Parece que ha pasado de juez prevaricador a payaso ilustrado”. Sobre otra desnutrición que no sea la de los niños en Andalucía: “La responsabilidad de los casos de desnutrición es de los padres”.
No he reparado, sin embargo, en que lo medios hayan tenido foco retrospectivo para esta noticia, quizá porque el tiempo transcurrido haya nublado la memoria de los cronistas parlamentarios (julio de 2005, primera legislatura de Zapatero): el intento de agresión física perpetrado por Rafael Hernando contra el entonces portavoz del PSOE, Pérez Rubalcaba, con ocasión del tenso debate sobre el trágico incendio forestal de Guadalajara, tierra natal de Hernando. El secretario general del PP, Ángel Acebes, y el portavoz de ese partido, Eduardo Zaplana, impidieron que el hoy portavoz del Partido Popular hubiera pasado a la historia del parlamentarismo español por tan deplorable altercado, que si ya es impropio un diputado mucho más lo es de su nuevo cargo.