Un informe del Ministerio de Interior de España señala que, en el primer semestre de 2014, se han producido 550 ataques motivados por el odio, la mayoría debidos a la orientación sexual o identidad de género de las víctimas (235), y en segunda línea los debidos a racismo y xenofobia (124) o a discapacidad (124), informa Colegas.
Las Comunidades con mayor número de delitos de odio son: Andalucía (166), Comunidad Valenciana (67), Comunidad de Madrid (58) y Galicia (53). En cuanto a los delitos por homofobia o transfobia Andalucía lidera alarmantemente estas estadísticas con 93 delitos, y le siguien a gran distancia otra serie de comunidades como Baleares (24), Galicia (22) y Comunidad Valenciana (19).
Hace unos meses un informe similar sobre los delitos recogidos en 2013 mostraba una tendencia similar con 1172 ataques, la mayoría motivados por la orientación sexual o identidad de género (452 casos) o el origen racial (381) de las víctimas. Andalucía, Cataluña y Madrid encabezaban estas estadísticas con 299, 188 y 136 casos respectivamente.
“Desde COLEGAS estamos satisfechos de que por fin empiecen a contabilizarse este tipo de delitos que estaba invisibilizado en las estadísticas oficiales de la policía. No obstante hemos detectado que las estadísticas no están homologadas en todas las comisarías de España, y que el número que se registra es sólo un iceberg de un número mucho mayor de delitos de odio por diversos motivos. El principal es que entre el 60 y el 90 % de las víctimas de estos delitos de odio no lo denuncia, según la Agencia de Derechos Fundamentales de la Unión Europea (FRA). No se denuncia por la sensación de que quedarán impunes o recibirán penas mínimas, por el miedo a represalias a las víctimas por parte de los delincuentes o su entorno, por la hostilidad o poca receptibilidad por parte de algunos policías ante este tipo de delitos, e incluso por el temor a exponer su situación ante la familia o su entorno que se da sobre todo en muchos homosexuales o bisexuales que están en el armario socialmente”, ha declarado Paco Ramírez, presidente de COLEGAS.
“El segundo motivo principal de la no contabilización total de los delitos de odio es la poca o nula formación por parte de las fuerzas de seguridad para tratar este tipo de delitos. Aparte de la tipología del delito (hurto, agresión, violencia, insultos…) desconocen y no señalan la otra variable del delito que es la causa o motivación del mismo que muchas veces es el odio y la intolerancia. Por ello desde COLEGAS pedimos que las fuerzas de seguridad del estado se formen en atender de forma correcta a las víctimas de delitos de odio y registrar correctamente en las denuncias e informes. Hace ya 3 meses que pedimos una reunión con el Secretario de Estado de Seguridad, y aún estamos esperando”, afirma Paco Ramírez.
“La falta de una ley que castigue la discriminación motivada por el odio, ya sea homofobia, xenofobia, racismo, antisemitismo, etc… está logrando que muchos delitos de odio queden impunes o cuando no son castigados levemente. Es necesario una urgente Ley de Igualdad de Trato y No Discriminación que regule este tipo de delitos en nuestro país, ante la ambigüedad y el vacío legal existente en este momento en nuestro país. Con una Ley de Igualdad de Trato y No Discriminación tendremos por fin una herramienta legal para combatir los delitos de odio y garantizar de manera efectiva el cumplimiento del principio de igualdad y proteger a la ciudadanía frente a cualquier tipo de discriminación”, concluye Paco Ramírez.