La autoridad municipal pide disculpas públicas a los padres de Israel Arenas Durán por su desaparición forzada en Juárez, Nuevo León
Este 14 de mayo de 2013, en la Sala del Cabildo de Juárez, Nuevo León, el alcalde Rodolfo Ambriz Oviedo pidió disculpas públicas a los familiares de Israel Arenas Durán, asumiendo la responsabilidad de la autoridad municipal por las actuaciones de la policía local, en cumplimiento de la recomendación 53/2013 emitida por la Comisión Estatal de los Derechos Humanos de Nuevo León.
Según informa Consuelo Morales Elizondo, presidenta de Ciudadanos en Apoyo a los Derechos Humanos (Cadhac), el 17 de junio de 2011 los jóvenes Israel Arenas Durán, Adrián Nava Cid, Javier García Álvarez y Reynaldo García Álvarez fueron desaparecidos por agentes de tránsito del municipio de Juárez. Al salir de un bar, mientras esperaban al hermano de Israel con el dinero para liquidar la cuenta, los oficiales persiguieron y detuvieron a los cuatro jóvenes para posteriormente entregarlos a miembros de la delincuencia organizada. A la fecha no se sabe nada acerca de paradero de Israel, en ese entonces de 17 años, ni de sus tres compañeros. A casi dos años de lo ocurrido hay cinco presuntos responsables detenidos, entre ellos el entonces policía Juan Eduardo de León.
Después de que el alcalde asumiera la responsabilidad por los hechos ocurridos y pidiera disculpas públicas a la familia de Israel, sus padres, Luz María Durán y Emiliano Arenas tomaron la palabra. Aceptaron las disculpas ofrecidas no sin aclarar que éstas nunca serán suficientes ante el dolor tan grande que han sufrido día tras día desde la desaparición de su hijo. Recordaron que toda persona desaparecida tiene un padre y una madre que sufre igual que ellos. Luz María y Emiliano hicieron hincapié en que el alcalde debe hacer todo lo necesario para asegurar que algo así nunca vuelva a ocurrir; y lo urgieron a capacitar a sus agentes en materia de derechos humanos, haciendo énfasis en el trato que deben dar a los menores de edad. La familia Arenas Durán estuvo acompañada por miembros del grupo de familiares que desde 2011 han buscado incansablemente la verdad y la justicia de lo sucedido con sus seres queridos.
La importancia de este gesto radica en que las autoridades reconocen que en casos como el de Israel y sus compañeros son los agentes estatales quienes actúan de manera criminal, y no los ciudadanos, como muchas veces se quiere dar a entender. La solicitud de perdón de manera pública es el inicio de un proceso de reconciliación que deberá garantizar la no repetición de eventos de esta naturaleza. Al reconocimiento de los daños cometidos debe seguir la construcción de instituciones justas y garantes de los derechos humanos, la reparación del daño de manera integral, el reconocimiento solidario por parte de la comunidad del dolor que sufren las víctimas, y el castigo a los responsables.
