Una vez más, gracias a la Federación de Asociaciones de Personas con Discapacidad Física y Orgánica de la Comunidad de Madrid, (FAMMA), se ha visibilizado al colectivo con discapacidad que no está en igualdad de condiciones cuando viaja en Renfe.
Por ello, ha solicitado la intervención de la Fiscalía ante la constante discriminación que tanto ADIF como sus entidades adscritas, RENFE-Cercanías, practican de manera continuada hacia este colectivo en la Comunidad de Madrid.
Para ello, en el escrito que ha presentado alegan que deban existir igualdad de oportunidades para garantizar una vida independiente y en especial de las personas con movilidad reducida así como el respeto por este colectivo cuando solicita ayuda. En ocasiones ha existido un abandono y discriminación que han supuesto una situación de aislamiento para estas pesonas en las estaciones que no cuentan con las condiciones básicas de accesibilidad.
«El Ministerio de Fomento, Adif y Renfe Operadora, entidades responsables de las Infraestructuras y Estaciones, no permiten el tránsito o desplazamiento con autonomía y seguridad, puesto que las estaciones denunciadas son totalmente inaccesibles para ellas» alegan.
Se solicita que se eliminen todas las barreras arquitectónicas de las estaciones y que se modifiquen las mismas para que se garantice la accesibilidad y la no discriminación a las personas con discapacidad. A pesar de esta denuncia, RENFE sostiene que el 70 % de las estaciones de cercanías cuentan con itinerarios accesibles que están siendo utilizados por 770.000 viajeros al día. Las estaciones de Colmenar Viejo, San José de Valderas y Ramón y Cajal actualmente están adecuándose a la normativa de accesibilidad, entre los que se encuentran, la instalación de ascensores, escaleras mecánicas, pasos inferiores, itinerarios accesibles, andenes accesibles, etc. Las nuevas estaciones de Soto del Henares, Valdebebas, Mirasierra-Paco de Lucía, son accesibles ya para las personas con movilidad reducida.
Por otro lado, Renfe-Cercanías ha sido objeto de varias denuncias llevadas a cabo por el colectivo que comprende la discapacidad visual y auditiva, dado que no siempre están conectados ni el audio ni el video para observar por qué estación se va o cuál es la estación a la que se llega.
Si no funciona el audio, las personas con discapacidad visual no saben si han llegado o dónde están, y si no funciona el visor de leyendas que está situado en los trenes, las personas que no oyen, no pueden saber si deben bajarse o no; un punto más de discriminación que no obedece solo a la movilidad reducida sino a la discapacidad sensorial.
Asimismo RENFE está elaborando según han informado, un plan de accesibilidad universal para el periodo 2018-2026 que contempla nuevas actuaciones para conseguir una plena accesibilidad de estaciones, trenes y todos sus servicios, con el objetivo de proporcionar a los viajeros un ferrocarril de calidad accesible.
Esta discriminación denunciada en la comunidad de Madrid ha sido también visibilizada en Cataluña por el Comité Catalán de Representantes de personas con discapacidad (COCARMI) cuyo presidente, Antonio Guillén ha declarado que RENFE es el medio de transporte que presenta mayores problemas para las personas con discapacidad dado que el 52 % de los trenes allí no son accesibles.