En un discurso pronunciado el 12 de septiembre de 2019 en el almuerzo anual que reúne a los simpatizantes del Partido Republicano en Baltimore, el ultraconservador y xenófobo presidente estadounidense Donald Trump aseguró que las bombillas de bajo consumo dan “un tinte anaranjado a su rostro”, según cuenta el canal CNN y recoge el digital de France Télévisions.
Entre otras cosas, criticó el precio de las bombillas Led, asegurando que son «mucho más caras que las viejas bombillas incandescentes que funcionaban muy bien», y se quejó de que «se nos obligue a utilizar bombillas que me dan siempre un color naranja».
Lo que podría parecer simplemente una respuesta a las críticas que se le hacen a veces, diciendo que se ha pasado con la lámpara de rayos ultravioletas, en realidad esconde un nuevo asalto de su administración a las normas de protección del medio ambiente, después de que el propio Trump “haya suprimido recientemente las normas que preconizaban la desaparición total de las ‘antiguas’ bombillas incandescentes a partir de 2020”.
Una ley aprobada en el Congreso de Estados Unidos 2007 hacía obligatorio alcanzar un nivel elevado de economía de energía, imposible si se siguen utilizando bombillas de filamento incandescente.