“El hoyo” (The Platform), primer largometraje del bilbaíno Galder Gaztelu Urrutia, ciencia ficción con una pizca de angustia, ha ganado en los festivales internacionales de Toronto (People’s Choice Midnight Madness Award) y Sitges (Mejor Película de la Sección Oficial Fantàstic), es una producción española que ha arrasado en todo el mundo y ha seducido a Netflix.
En Sitges, “El Hoyo” consiguió también el Premio del Público y el Citizen Kane al Mejor Director Revelación, así como el de los Mejores Efectos Especiales, creación de Iñaki Madariaga.
Thriller con carga social y el hambre como protagonista, “El Hoyo” está interpretada por Iván Massagué (‘Los últimos días’, ‘El año de la plaga’), Zorion Eguileor (‘Agur Etxebeste’; ‘Arriya’ La piedra), Antonia San Juan (Todo sobre mi madre, Piedras) , Alexandra Masangkai (‘Los últimos de Filipinas’, ‘1898’) y Emilio Buale (‘Rec 4’: ‘Apocalipsis’; ‘Bwana’).
En una estructura vertical que parece no tener fin (en un momento dado se habla de 250 niveles), en cada uno de los estratos conviven durante treinta días dos personas que no se conocen. Una plataforma, especie de ascensor-montacargas en forma de enorme mesa cargada de comida, recorre las alturas de principio a fin.
A medida que la plataforma desciende va quedando menos comida y en peores condiciones; de hecho, da bastante asco ver a los personajes coger con las manos masas que parecen excrementos y devorarlas como si fueran animales depredadores.
En algún momento, las alturas cambiarán de lugar y los menos afortunados pasarán a encontrarse en los primeros niveles. De la solidaridad de éstos últimos dependerá la supervivencia de quienes están en las profundidades.
Lo que no parece es que ninguno de ellos vaya a escapar nunca de ese desagradable e inquietante lugar.
https://youtu.be/Oyuomep8Ac4
El jurado de Sitges ha valorado en la película «la profundidad con la que se abordan diferentes aspectos de las carencias humanas» y «las ramificaciones sociales y políticas de la trama», comentarios que no puedo avalar simplemente porque entre mis muchas lagunas está la de haber nacido demasiado pronto y ser incapaz de empatizar con este tipo de historias tan poco terrenales.