Cinco meses después de la finalización del último contrato de soporte informático del Instituto de Mayores y Servicios Sociales conocido por IMSERSO, a día de hoy, no se ha completado la nueva licitación del servicio técnico encargado de mantener las aplicaciones informáticas y los sistemas informáticos que componen el sistema para la autonomía y atención a la dependencia (SISAAD).
Al no tener control informático sobre este sistema, estamos hablando del 14 de noviembre de 2017, fecha en la que expiró el contrato de prestación de servicios, el sistema de dependencia está sin datos. A pesar de tener marcado el final definitivo del contrato, el IMSERSO, no hizo pública la nueva licitación del servicio en el Boletín oficial del Estado (BOE) hasta el 7 de noviembre; una semana antes de la conclusión de adjudicación a Indra. El proceso se inició de nuevo el 30 de noviembre para que los interesados presentaran las candidaturas pero este se demoró hasta el 21 de diciembre y posteriormente al 25 de enero por la suspensión de la apertura de las ofertas económicas.
El IMSERSO alega, que no disponen de las puntuaciones emitidas en relación a las ofertas técnicas según cita en el acta de resolución fechada el 10 de abril y por ello, aún no funciona el servicio. El actual vacío de control de los sistemas informáticos del Sisaad aunque se repartiría entre Everis e Indra con un coste total de 1.7 millones de euros, pero aún no se ha formalizado el contrato. De ser así, como en los años anteriores que pasaron hasta cinco meses para aprobar definitivamente el contrato de servicios, nos encontraríamos con un abandono del sistema de dependencia que no funcionaría hasta septiembre por la llegada del verano, además.
Esto supone que en España, el sistema que gestiona la dependencia estaría abandonado durante diez meses naturales. Hablamos de personas mayores; dependientes; personas con discapacidad; personas, que aún, están esperando una respuesta a una situación insostenible; algo, que la ministra de Sanidad, Asuntos Sociales e Igualdad, Dolors Montserrat, quizá, ignora.