El último informe «World Economic Outlook» publicado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) mantiene a España a la cabeza del crecimiento entre las economías avanzadas, al tiempo que el estudio anual «Small business, great opportunities», elaborado por Sage, revela que las pequeñas y medianas empresas (pymes) españolas demandan un mayor apoyo por parte de grandes compañías y administraciones para impulsar sus negocios.
Una primera conclusión de la lectura de ambos informes es que los avances en software y soluciones para empresas, gracias a la digitalización, empresas de todo el mundo han logrado expandir su potencial, pero que la implementación de procesos digitales continúa siendo una asignatura pendiente para muchas pymes, al no disponer de los recursos de las grandes empresas u organismos públicos.
Un dato concreto es que la Inteligencia Artificial (IA) solamente forma parte de la estrategia tecnológica del ocho por ciento de las pymes españolas, cuando tienen la misma necesidad que las más dimensionadas para implementar el aprendizaje automático (machine learning), el procesamiento del lenguaje natural (natural language processing), la vision por computadora (computer vision) y la robotica.
El estudio de Sage amplia al veinte por ciento el porcentaje de pymes españolas que demandan la ayuda de grandes compañías para impulsar sus competencias digitales con el objetivo de conseguir el ahorro de tiempo, la mejora del rendimiento TI que mide la eficiencia con la que una empresa está operando para lograr sus objetivos, y la reducción de costes que aportan las inversiones en tecnología.
Entre los principales beneficios que las inversiones en tecnologías aportan a las pymes españolas, Sage cuantifica el ahorro de tiempo (49 por ciento), integrar tecnologías para que funcionen mejor entre sí (38 por ciento), reducción de costes (34 por ciento), aumentar la productividad global del negocio (31 por ciento) y mejorar la relación con los clientes y ser capaces de atraer nuevos (24 por ciento)
El consenso general es que invertir en tecnología es una excelente manera de ahorrar tiempo y esfuerzo porque hace más eficientes los procesos al avanzar en la automatización, simplificar o incluso eliminar ciertas tareas que todavía se tarda mucho tiempo en completar; también se manifiesta en la necesidad de contar con personal cualificado para gestionar adecuadamente esas inversiones, que además debera compartir conocimiento con otras personas, dada la alta velocidad a la que avanzan estas nuevas tecnologías.
La globalizacion impone además que la toma de conocimiento no se quede en el ámbito local, porque se trata de problemas que afectan a empresas de todos los países del mundo, con las que cada año es más necesario relacionarse.
Esta realidad ha quedado patente en el estudio de Sage, en colaboración con Strand Partners, sobre una encuesta online a 11.986 líderes empresariales de pymes en febrero de 2023, que incluyen a diversos mercados en todo el mundo: España (1002), Canadá (1200), Francia (1221), Alemania (1068), Irlanda (1067), Portugal (1032), Sudáfrica (1111), Reino Unido (2138) y Estados Unidos (2147)
España: asesoramiento de expertos y planificación
A pesar de que el estudio revela que en los próximos doce meses más de la mitad de las pymes españolas tienen previsto aumentar la inversión en tecnología, se sigue manteniendo como asignatura pendiente la formación o mejora en competencias digitales del personal especializado en tecnología, ya que solo el quince por ciento de las personas encuestadas en España valora el desarrollo tecnológico de su plantilla como un beneficio de invertir más en tecnología, frente al 23 por ciento a nivel global.
Es necesario por lo tanto abordar con determinación esta brecha de talento digital y dedicar recursos a formar a los empleados en tecnología, ya que solo el ocho por ciento ha mantenido en el último año la estrategia de fomentar avances en Inteligencia Artificial para automatizar procesos, aumentar la visibilidad de los datos y ampliar la conectividad, para poder trabajar en ecosistema más amplio de clientes, proveedores, empleados y gobiernos.
«Esta claro que las pymes de 2023 ya se benefician de procesos automatizados y de información actualizada sobre sus operaciones de negocio. Sin embargo, en la práctica todavía quedan muchos pasos por dar para que estos avances lleguen a todos los negocios por igual. La tecnología emergente trae consigo nuevas oportunidades que no deben pasarse por alto. La innovación en distintas materias como la IA, el 5G o el blockchain está creando una nueva era de negocios más intuitivos. Es un futuro que llamamos la Red Digital, y nuestro informe muestra que las pymes ya están apostando por esta visión y dando los pasos necesarios para alcanzarla», afirma Jose Luis Martin Zabala, director general de Sage en España y Portugal.