El pleno del Congreso de los Diputados de España ha considerado la posibilidad de iniciar la despenalización de la práctica de la eutanasia en determinadas circunstancias, gracias al apoyo que han expresado casi todos los grupos a la proposición de ley que inicia ya su tramitación.
La mayoría del Congreso ha considerado implementar una legislación específica y exhaustiva acerca de las situaciones que conllevan la práctica de la eutanasia y que el uso de la misma solamente se convierta en la llamada muerte digna como un derecho de los ciudadanos.
Solamente el PP y el UPN se han opuesto a sacar del código penal dicha práctica si bien Ciudadanos se ha abstenido porque no está de acuerdo con el planteamiento. Los grupos políticos, PSOE, Unidos Podemos, PNV, ERC, PDeCat y Compromís han aprobado este supuesto de forma que ya se puede admitir a trámite la propuesta de ley. Esta iniciativa impulsada por el Parlamento de Cataluña alude solamente a la despenalización de la eutanasia de forma que se modifique el apartado 4 del artículo 143 del código penal.
En dicha propuesta quedan exentas de responsabilidad penal las personas que ayuden a morir a un paciente que sufra una enfermedad grave que lo conducirá necesariamente a la muerte o a una enfermedad inculable que le procura sufrimiento físico o psíquico grave.
Actualmente la legislación española en torno a esta práctica castiga con penas de entre cuatro y ocho años de cárcel a quien induzca al suicidio a otro; penas que se agravan entre seis y diez años si además dicha cooperación termina en la muerte del paciente. Para el Partido Popular, la consideración de la práctica de la eutanasia es impensable, dado que no quieren que se plantee como un nuevo derecho, puesto que el paciente solo quiere vivir sin sufrimiento y por ello, se le deben cuidar con paliativos, no con un suicidio asistido.