Es Arcángel de segundo apellido y de nombre artístico. Para muchos es “la voz” flamenca, el cantaor más completo del panorama flamenco actual. Es músico, compositor, coreógrafo, creador de espectáculos, investigador musical y a ratos, cuando se tercia, guitarrista y bailaor. Tiene una relación muy especial con su público, por cercanía, por implicación. Para muchos es el revolucionario del momento, heredero de Paco de Lucía, Camarón y Morente. ¿Es perfecto? De lo que no cabe duda es que es un gran tipo, un gran artista.
Estuvo en la Catedral del Cante de La Unión, el lunes 6 de agosto de 2018, presentando aquí su último trabajo de estudio, Al Este del Cante, con el coro de las hermosas ocho voces búlgaras femeninas dirigidas por Giorgi Petkov.
Las “Voces Búlgaras” son de largo conocidas en España, actuando con varias orquestas. El precedente para Arcángel es con Enrique Morente y con él mismo en Córdoba en 2014. Desde la grabación de Al Este del Cante, las voces se han renovado en “Nuevas Voces Búlgaras” en las jóvenes cantantes Adela, Evelyn, Giuliana, Moriana, Tatiana, Moira, Verónika y María. Una delicia de voces, hermosamente dirigidas por el maestro Petkov.
El concierto en clave de gran espectáculo musical tuvo momentos solistas de Arcángel, con su guitarrista habitual Dani de Morón. En cuarteto, él con su guitarrista, con el contrabajo de El Popo y la percusión de Agustín Diassera; canciones populares búlgaras por el coro. Palos flamencos con el coro en background con exquisita polifonía. Dúos de cante y toque, de bajo y percusión. Homenajes musicales a grandes amigos y mentores de Arcángel, Morente, Lole y Manuel, a Camarón y al padre espiritual de todos los flamencos, el poeta siempre vivo Federico García Lorca.
La voz del cantaor dirige, prevalece. A Giorgi Petkov se le ve feliz, dirigiendo ya a sus chicas, ya a toda la orquesta y coro. El Sur y el Este se combinan de maravilla, dejando estelas de interculturalidad, diálogos entre dos culturas que reafirman el entendimiento entre los pueblos, entre las artes. El disco en que se apoya el espectáculo suena a gloria, pero no puede compararse al espectáculo en vivo y en directo, un espectáculo que hay que ver más de una vez y siempre tendrá toques diferentes. Aquí en la Catedral hubo que acortarle un poco, por aquello de la gala doble y en este caso además entrega de premio entre los dos conciertos, el de Arcángel y su troupe y el de Antonia Contreras.
Pero estuvieron los grandes hitos de esta obra monumental, me permito saltarme su orden de ejecución en escena: De Lorca, los dos monumentos de su etapa más surrealista, La aurora de Nueva York, en homenaje al autor de esa experiencia personal desgarrada que plasmó en Poeta en Nueva York, y en recuerdo al primer artista que la musicó, Enrique Morente. La leyenda del tiempo, presente en centenares de conciertos flamencos desde su lanzamiento revolucionario por Camarón de la Isla, misteriosamente sacada del inicio del tercer acto de la pieza teatral más surrealista del poeta granadino, Así que pasen cinco años, un título profético donde los haya. Estuve atenta a a los posibles momentos musicales surrealistas y los encontré, sobre todo en la aurora, en esta versión arcangeliana. Un tercer poema lorquiano estuvo esa noche al final del concierto, de su obra Poemas del alma, la popular Baladilla de los tres ríos.
Estuvo el bellísimo recuerdo a Manuel Molina, en el poema musical Cabalgando van los gitanos, las canciones populares búlgaras recogidas en Dumbata en las que la emoción de Giorgi Petkov era tan evidente como contagiosa. Cantes por bulerías, por alegrías, un dúo de cante y toque por las seguiriyas más dramáticas, solemnes y poéticas, con ayeos largos y profundos, al más genuino estilo Arcángel, en íntima y emocionante conversación con Dani de Morón.
Donde esté Arcángel nunca faltarán los fandangos de su tierra, de Huelva y Alosno, con las hermosas voces búlgaras uniendo diferencias, en ese cante de nombre misterioso, 23 Diez. ¡Que bien combinan los fandangos y la tradición búlgara!
Un disco para escuchar a menudo, para ver siempre que se pueda en vivo y en directo, cerca de los artistas para no perderse expresiones, ni los matices más recónditos.
La noche del lunes 6 de agosto marcará el Festival Cante de las Minas 2018.