Antonio Manuel Rodríguez, profesor de Derecho Civil de la Universidad de Córdoba, sostiene que “el franquismo institucional está vivo, intacto”, según desarrolló en una de las iniciativas del curso «Libertad de Expresión en el siglo XXI: nuevas tecnologías, nuevos retos», moderada por María Garzón y en la que también participó Cecilio Gordillo, coordinador CGT de Memoria Histórica de Andalucía, informa Aurora Moya.
En este «cara a cara» con Antonio Manuel Rodríguez, Cecilio Gordillo dijo que “estamos en un momento de marcha atrás. El franquismo no murió con Franco en la cama. Los medios de comunicación tienen un papel para dar a conocer el trabajo de las asociaciones de memoria, de los historiadores… porque una verdad no lo es hasta que no es conocida”.
Antonio Manuel Rodríguez había destacado previamente en relación a la sublevación de los militares que encabezó Francisco Franco, que “algo estamos haciendo muy mal cuando los poderes hablan con tanta normalidad del golpe de Estado. Me pueden amputar todo menos la memoria, si me la quitan dejo de ser quien soy”.
María Garzón, moderadora del debate dijo por su parte que “desde el Estado no se ha facilitado el acceso a la información sobre aquellos hechos. Hay gente que tiene aún temor y gente que se siente capaz de arengar a favor de esta historia de mentira que nos ha contado. ¿Qué es lo que hemos hecho mal en nuestra democracia?”
Para Cecilio Gordillo “el problema de esta democracia es el miedo a hablar de estos temas de memoria, el miedo es el eje manipulador del poder sea el que sea, el político, el religioso. Los miedos tienen una gama donde elegir».
Para el profesor Rodríguez “la Republica intentó incorporar España a la modernidad y simbólicamente desapareció la confusión iglesia-estado-monarquía como única posibilidad. Surge un nuevo modelo territorial y se añade a la sociedad la figura de la mujer. Todo ello es lo que atacaba la noción nacionalsocialista de España. Los lobbys de poder se asentaban en esa época sobre esa noción que permitía las desigualdades sociales, temían que el modelo sucumbiera y por eso dieron el golpe de Estado”.