Galería Odalys exhibió el verano de 2015 en su sede madrileña de la calle Orfila una colección de cien obras de tres maestros venezolanos vinculados al movimiento de arte conceptual en su etapa más POP reunidas por primera vez en una sola muestra.
Dichos maestros son Roberto Obregón (1946-2013), Claudio Perna (1938-1997) y Rolando Peña (1942) y las creaciones pertenecen a esa etapa Pop tan característica -y juguetona- de sus autores. De hecho, por seguirles en esta tendencia tan fecunda, para la exposición se ha construido con la palabra POP un ingenioso juego de palabras, puesto que se refiere por igual al movimiento artístico así designado y a los apellidos de los 3 artistas que la componen con cuyas iniciales se forma.
No hay duda de que la galería Odalys, con sede en Venezuela, ha querido traer a Madrid lo mejor de los maestros venezolanos actuales en esta especialidad: «POP es una muestra exquisita que busca dar a conocer a museos y coleccionistas europeos las obras de estos maestros venezolanos. Contiene piezas maravillosas muchas de las cuales apenas fueron expuestas una vez y otras son totalmente inéditas. Por ejemplo, hay una disección de Obregón que mide 6 metros de largo por 3 de altura y que tiene 24 pétalos: esa fue la última disección que él hizo, y nunca había sido expuesta», declara Odalys Sánchez, directora de la galería.
Las obras de los tres artistas se encuentran distribuidas y ordenadas, conforme a las tres letras Pop, a lo largo de los tres espacios de la galería a los que se accede avanzando. La primera, dedicada a Obregón, contiene, además de obras tan llamativas como la que representa a Simón Bolívar paseándose a caballo por La Primavera de Sandro Botticelli, tres piezas de antología que elaboró con latas de Coca-Cola, 12 personajes pop (entre ellos Marilyn Monroe o Sigmund Freud) representados en 12 rosas y una serie inédita titulada En nombre de la rosa, que presenta las distintas formas de nombrar a esta flor en varios idiomas.
La segunda sala, dedicada a Claudio Perna, presenta dos óleos (uno de ellos una intervención Pop de la advocación colonial de la Virgen sobre Caracas) y una proyección de 32 piezas en diapositivas, con sus respectivas impresiones, de escenas de performances en las que imágenes audiovisuales se reflejan sobre el cuerpo desnudo del autor. En una de estas performances me pareció reconocer la cara de Saturno devorando s sus hijos, de Goya, tal es la capacidad de juego y de diálogo que se establece con el arte y las diferentes culturas.
En la sección dedicada a Rolando Peña se exhiben 34 piezas, entre las que destacan las de la serie Santería, donde incluye a personajes como María Lionza, José Gregorio Hernández, Simón Bolívar o la Virgen de Coromoto, que fue elaborada por el artista en la década de 1970. Además, se muestra una serie de fotomatones capturados por Peña durante sus viajes entre 1965 y 1980. El propio artista, llamado por su arte «El Príncipe negro», presente en la galería el día de la inauguración, declaró: «cuando llegué a Nueva York me confronté con el Pop a partir de mi amistad con Warhol y me sentí retado a hacer una versión sobre mi cultura. Estas piezas son de entonces y han generado polémica. Yo soy un provocador». Todo un personaje, amable y creativo y totalmente accesible al trato. Lo cierto es que sus obras son muy divertidas de contemplar en las que uno se puede recrear hasta descubrir todos sus contenidos y significados ocultos.
Odalys Sánchez no descarta que estas piezas lleguen a Venezuela tras el cierre de la exposición en Madrid. De hecho, su plan en adelante es lograr una «pendulación de las muestras entre las sedes». Su otra sede en España es Marbella.
Galería Odalys: Pop
C/ Orfila, 5, Madrid