Bien poco caso hace la prensa española al duelo futbolístico acaso más importante de la pretemporada: el partido de la final del torneo cuadrangular Audi 2013 disputado ayer en el Allianz Arena de Múnich entre el Bayern Múnich y el Manchester City. O sea, Pep Guardiola vs. Manuel Pellegrini.
Años volverán a pasar desde el gran Arsenio Iglesias del Súperdepor hasta que el deporte rey vea a otros dos entrenadores tan caballeros de pura casta señorial como el ingeniero uruguayo más prometedorex, ex del Real Madrid, y el ex del mejor Barça de la historia, el mago de Santpedor .
Ahora se disponen a reinar en la Premier y la Bundesliga. Lo conseguirán, seguro. Siete jugadores del equipo de Pellegrini hablan español como lengua materna: los ibéricos David Silva, Javi García, Denis Suárez, Jesús Navas y Álvaro Negredo más los latinoamericanos Sergio Agüero y Pablo Zabaleta. En el Bayern son dos, Javi Martínez y Thiago Alcántara… hasta que se incorpore Cesc Fàbregas y vayan a saber ustedes si incluso el propio Andrés Iniesta. Tal como están las cosas con los recortes y la emigración de talentos españoles, a saber dónde acabarán los mismísimos Iker Casillas y Xavi Hernández…
«El Bayern de Guardiola vence al Manchester City», rezan los titulares de prensa. Se olvidaron de añadir el nombre del entrenador que hará del City uno de los grandes-grandes de todos los tiempos, el ingeniero Pellegrini, a quien ni el Villareal, ni el Real Madrid, ni el Málaga nunca debieron haber dejado marchar. Al tiempo.