El año en que ETA fue más asesina que nunca: 1980. Como escribiera el historiador José Antonio Pérez Pérez, en aquel 1980 “la banda terrorista cometió doscientos atentados, acabó con la vida de más de noventa personas, sin contar los heridos, la extorsión económica, la docena de secuestros que se produjeron en aquellos meses, los terribles estragos, el chantaje y sobre todo un elemento imposible de cuantificar y expresar en cifras: el miedo. Un miedo denso, soterrado y silencioso.
Decía el periodista y escritor Luciano Rincón refiriéndose a aquella época: ‘teníamos miedo incluso de decir que teníamos miedo’. La mera confesión de ese sentimiento podía poner a quien así se expresaba en el punto de mira, en el ojo acusador de la sospecha. En efecto, una vez más, “convendría recordar a los más críticos las tremendas dificultades que tuvo que solventar la joven democracia en España para consolidarse, acosada por el terrorismo y por un ensordecedor ruido de sables que atronaba en los cuarteles”.
1980 es también el año de la película Gary Cooper, que estás en los cielos, de Pilar Miró; del primer film de Pedro Almodóvar, Pepi, Luci, Bom Y otras chicas del montón; y del primero de Fernando Trueba, Ópera prima, o de una joya extraña y oscura, Arrebato, de Iván Zulueta. También el año de las novelas Cuánta, cuánta guerra, de Mercè Rodoreda, y Volavérunt, escrita por Antonio Larreta.
Y es casi por encima de todas las cosas el año del estallido maravilloso del pop español hijo de los nuevos tiempos de la Transición, un año en el que Tequila sacaba a la calle su tercer elepé (Viva! Tequila!), en el que triunfaba Pedro Marín con su canción Aire, el año del lanzamiento de espléndidos grupos como Nacha Pop, que daban a conocer su memorable Chica de ayer, Mamá y sus Chicas de colegio, Los Secretos y Déjame y Sobre un vidrio mojado, Radio Futura con su Divina y con su electrizantemente joven Enamorado de la moda juvenil, Los Zombies y Groenlandia, Alaska y Los Pegamoides, que gritaban perlas pop como Horror en el hipermercado, pero también el año del primer Joaquín Sabina y su himno Pongamos que hablo de Madrid, del popularísimo por fin Miguel Ríos, quien cantaba el Santa Lucía de Roque Narvaja, y de un cantautor para todos los públicos en la cumbre de su éxito, José Luis Perales, quien nos cantaba a todas horas por aquel entonces Un velero llamado libertad. La libertad que rebosaba un país en tránsito.
1980
El 1 de febrero, ETA asesina a seis guardias civiles en la localidad vizcaína de Ispáster.
El 64,19 % de los andaluces participa el 28 de febrero en el referéndum para decidir que su acceso a la autonomía se lleve a cabo por el más permisivo, abierto y rápido artículo 151 de la Constitución; un 86,94 % de ellos vota afirmativamente y ese resultado perjudica a Unión de Centro Democrático (UCD) pues, aunque el ministro Manuel Clavero Arévalo había recomendado el sí en dicho plebiscito, el partido gubernamental apoyó la abstención (razón ésta por la que aquél por cierto había dimitido un mes antes de la votación).
Se celebran el 9 de marzo las primeras elecciones al Parlamento vasco, en las que con mayoría simple se alza con la victoria el Partido Nacionalista Vasco (PNV).
El 20 de marzo tienen lugar las primeras elecciones al Parlamento de Cataluña tras la recuperación de la democracia y de las instituciones autonómicas, en las que con mayoría simple se alza con la victoria Convergència i Unió.
Dos meses más tarde, el 3 de mayo, Fernando Abril Martorell se convierte en el hombre fuerte del ejecutivo tras la remodelación gubernamental efectuada por el presidente Adolfo Suárez.
El 7 de mayo se celebra el consejo de guerra que condena a siete meses y un día al teniente coronel de la Guardia Civil Antonio Tejero, y a seis meses y un día al capitán de la Policía Armada Ricardo Sáenz de Ynestrillas por su participación en la llamada Operación Galaxia, su fallido plan golpista de 1978. El Consejo Supremo de Justicia Militar subiría el 2 de julio en un mes la duración de las penas a ambos.
ETA asesina el 15 de mayo en San Sebastián a tres policías y, un día más tarde, a cuatro personas, dos de ellas guardias civiles, otra de ellas un empresario y una última un trabajador, en Navarra, Álava y Guipúzcoa.
Entre el 28 y el 30 de ese mes de mayo, se debate en el Congreso de los Diputados la moción de censura presentada por el PSOE contra Suárez, que sirve para promocionar la capacidad de liderazgo de Felipe González (quien se presenta como candidato a la presidencia gubernamental por medio de dicha iniciativa parlamentaria), pese a que no obtiene finalmente su objetivo oficial, pues es derrotada.
El 28 de junio, ETA asesina a tres personas en la localidad guipuzcoana de Azcoitia.
Del 7 al 9 de julio se reúne la Comisión Permanente de UCD en una finca del municipio madrileño de Manzanares el Real, en lo que dio en llamarse La casa de la Pradera, donde se discute e incluso se menosprecia la valía política de Suárez.
El día 9 del mes de septiembre comienza a ejercer el que será último Gobierno de Suárez, del que desaparecen Abril Martorell (sustituido por Leopoldo Calvo-Sotelo como segundo vicepresidente para Asuntos Económicos), Marcelino Oreja Aguirre e Íñigo Cavero, y al que se reincorporan Rodolfo Martín Villa, Francisco Fernández Ordóñez (quien actuará decididamente para dar un nuevo impulso a la conocida como ley del divorcio) y Pío Cabanillas.
Entre los días 16 y 18 de septiembre, Suárez presenta en el Congreso de los Diputados una cuestión de confianza para su nuevo gabinete y consigue superarla con los votos de UCD, la Minoría Catalana, los andalucistas y el de uno de los miembros del Grupo Mixto.
ETA asesina el 20 de septiembre a cuatro guardias civiles en la localidad vizcaína de Marquina, el 3 de octubre a tres policías en la vizcaína Durango y un día después a tres guardias civiles en la localidad alavesa de Salvatierra.
El 14 de octubre Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón, democristiano, es elegido portavoz del grupo parlamentario de UCD frente al socialdemócrata Santiago Rodríguez-Miranda Gómez, apoyado por Suárez.
ETA asesina el 3 de noviembre a cuatro guardias civiles en la guipuzcoana Zarauz. Al finalizar 1980, la banda terrorista vasca habrá asesinado a 96 personas, y será por tanto ese el año más cruento en lo referido a su actividad asesina.
El 21 de diciembre tiene lugar la aprobación del Estatuto de Autonomía de Galicia, por referéndum celebrado en esa comunidad autónoma.