Un hematometra (gran cantidad de sangre), es una retención abundante de sangre que se produce en el útero cuando durante una menstruación, ésta y los loquios uterinos, no se evacúan correctamente y producen una obstrucción mecánica que se manifiesta con un dolor muy intenso.
Cuando se le ha diagnosticado a una mujer un hematometra de forma temprana, se evitan además, otros problemas asociados a este: desde el cáncer de cuello, una endometriosis avanzada y otras cuestiones relativas al aparato reproductor.
Es habitual ver en la clínica, una estenosis congénita; una estrechez secundaria o una menstruación excesiva con coágulo, si bien, existe además, inflamación local del peritoneo y una dilatación de la cavidad uterina anormal.
El fuerte dolor que experimentan las pacientes obedece a uno tipo cólico, dado que se inflama la zona y la sangre busca la salida por las trompas e irrita el peritoneo y el recto.
El sangrado puede llegar a ser muy oscuro y cesará el dolor cuando se abra el cuello uterino y se permita salir a la sangre almacenada. Los ginecólogos suelen proceder con oxitócicos y el uso de uterotónicos, y para que se dilate se utiliza la dilatación cervical instrumental como si se fuera a parir un hijo.