Hemeroteca
Stéphane Hessel ha fallecido a los 95 años de edad. Los elogios y homenajes llueven hoy sobre su persona en todos los medios de comunicación, si bien sus intervenciones públicas en estos últimos años en favor de la justicia social, de los indocumentados, de los inmigrantes, del antiracismo o de la justa causa del pueblo palestino, iban a menudo al encuentro de las opiniones y de la política desarrollada por los que hoy le proclaman su admiración.
Stéphane Hessel combatiente de la Francia libre junto al general De Gaulle, superviviente del campo de la muerte de Buchenwald, participó en la resistencia contra el nazismo y fue uno de los redactores en la ONU de la célebre Declaración Universal de Derechos Humanos. Escritor y poeta, se hizo célebre en el mundo entero a sus noventa y dos años de edad, tras la publicación en 2010, del opúsculo “Indignaos” que ha dado la vuelta al mundo, traducido en varios idiomas, como faro en la rebelión del movimiento de los “Indignados”.
De Madrid, a Paris, o Nueva York, los movimientos de protesta contra la austeridad y la miseria le tomaron como guía. Si en Francia su libro fue un bestseller del que se vendieron 2.100.000 ejemplares, paradójicamente fue en España donde el Movimiento de los Indignados fue más importante. En su edición española fue el economista José Luis Sampedro quien firmaba el prólogo.
Desde 1996 Hessel fue el más destacado portavoz y defensor de los inmigrantes e indocumentados, que habían ocupado la Iglesia parisina de Saint Bernard. Estimaba Hessel que la política de Francia en materia de inmigración debía ser compatible entre los intereses nacionales y los intereses de los países de los que procede la inmigración, pero todo ello en el respeto de los valores de humanidad y de solidaridad”. Consideraba Hessel, que “la presencia de los inmigrantes en Francia era una riqueza inestimable” y condenaba las políticas del poder contra la inmigración.
El antiguo embajador de Francia en la ONU, se había convertido con los años en un joven militante de esas causas que el lenguaje oficial presenta siempre como “perdidas de antemano”. Haciendo suyo ese eslogan que decía “ninguna batalla está perdida, excepto aquellas que nunca se han librado”, Hessel escribió su panfleto político filosófico “Indignaos” contra la política de inmigración de Nicolas Sarkozy y de Francois Fillon en 2010, y se pronunció explícitamente contra las expulsiones de los gitanos y romas instalados en Francia.
“Indignaos” era un panfleto contra la resignación y la apatía. Una llamada a la juventud del mundo entero a “Indignarse” como un primer paso hacia el compromiso ciudadano y la resistencia. Hessel se autodefinía como reformista y no era hombre de Partidos, pero cuando le preguntaban si no hacía falta en Francia un revolucionario como Jean Luc Melanchon, respondía: “como revolucionario prefiero al joven trotskista Olivier Besancenot”.
Personalmente tuve ocasión de estrechar la mano de este anciano vitalista, Stéphane Hessel, quien trasmitía optimismo y ganas de vivir y de luchar por todos sus poros, con motivo de la proyección en Paris en 2011 de una película documental “Instinto de resistencia” del cineasta francés de origen español Jorge Amat.
En el cine Passy de París Hessel provocó en cada una de sus intervenciones la ovación entusiasta de la sala. Un documental que evoca los retratos cruzados de cuatro supervivientes de los campos de la muerte, Stéphane Hessel, Armand Gatti, Pierre Daix y Serge Silberman. Cuatro destinos y cuatro vidas ejemplares. Su resistencia y sus combates, cada uno en su ámbito.
Una petición ha empezado hoy a circular en Francia, pidiendo la entrada de Hessel en el Panteón, donde están enterrados las grandes personalidades de la nación francesa. Entre los firmantes de la misma figura la eurodiputada ecologista y exmagistrada Eva Joly.
Le 10 oct 2011 le cinéaste Jorge Amat fit l’avant première de son film «L’instinct de Résistance en présence de Stephane Hessel et Armand Gatti.
Après la projection du film de Jorge Amat «L’instinct de Résistance» au cinéma le Passy en 2011 Stéphane Hessel récitât un poème pour clore la soirée organisé par «Espagnolas en Paris.