El Campeonato Mundial Femenino de Ajedrez que se celebra en la capital iraní, Teherán, del viernes 10 de febrero al sábado 4 de marzo se inicia sin dejar la polémica. Nueve de las 64 mejores jugadoras no asistirán y cuatro de ellas en clara referencia al boicot por la obligatoriedad del uso del hiyab (pañuelo que cubre la cabeza), otras aunque acuden han mostrado sus reservas públicamente.
La discrepancia se dio a conocer en octubre del año pasado, y hasta diciembre la organización, a cargo de la federación internacional, FIDE, no brindó más detalles, cuando informó de las fechas en que las jugadoras debían remitir las fichas para confirmar la inscripción y firmar el ‘contrato’ en el que se comprometen a cumplir las reglas del evento, entre las que se encuentra el uso del hiyab por parte de las participantes.
La estadounidense de origen georgiano, Nazi Paikidze-Barnes, campeona en su país, encabezó la campaña para que las jugadoras no fueran obligadas a llevarlo: “No llevaré hiyab ni apoyaré la opresión de las mujeres, incluso si supone perderme una de las competiciones más importantes de mi carrera”, escribió en su día al tiempo que pidió a la FIDE que reconsiderara la sede e inició una campaña de firmas en la plataforma change.org que terminó recogiendo casi 17.000 firmas. Sin embargo, la FIDE no cedió.
Paikidze-Barnes resolvió no participar al igual que la subcampeona mundial, la ucraniana, Mariya Muzychuk, quien declaró: “Irán, obviamente, no es un país adecuado para una competición tan prestigiosa de este tipo”. Su hermana Anna, sí acudirá aunque mostró ciertas reservas.
Tampoco participará por el mismo motivo la gran maestra internacional, cinco veces campeona argentina, primer tablero del equipo olímpico de ajedrez y coordinadora del programa de ajedrez de la Universidad Nacional de Tres de Febrero, la argentina Carolina Luján.
“Es el primer Campeonato Mundial femenino con tantas clasificadas que deciden no participar. Aquí hay una importante lección para aprender”, según el presidente de la Asociación de Profesionales de Ajedrez (APC, por sus siglas en inglés), Emil Sutovsky quien añadió: “los campeonatos del mundo de mujeres deben ser en un lugar conveniente para todos, sin restricciones y violaciones de derechos humanos”.
Diferentes medios internacionales se han preguntado qué campeonato de ajedrez es este que no cuenta con las mejoras jugadoras del mundo.
En el mismo grupo de ausentes están otros grandes nombres: la india Humpy Koneru, quien no ha explicado los motivos pero pudieran estar relacionadas con el hiyab; la siete veces ganadora del campeonato de Estados Unidos, Irina Cruz; las rusas Tatiana Kosintseva y Alisa Galliamova y la australiana Emma Guo. La rumana Cristina Adela Foisar, quien estaba clasificada, falleció el pasado mes de enero. Su hija participa por Estados Unidos.
Caso aparte es la ausencia de la actual campeona del mundo, la china Hou Yifan, autora de un desplante en el reciente torneo de Gibraltar, ya que considera que debe enfrentarse con hombres y no cree en el campeonato mundial femenino.
La ucraniana Natalia Zhukova, la rusa Alexandra Kosteniuk y la alemana Elizabeth Paethtz también mostraron reservas aunque acudirán al Campeonato. Las indias Harika Dronavilli y Rout Padmini también asisten pero han declarado: “no es muy cómodo jugar con el pañuelo pero lo más importante es el campeonato del Mundo”.
La ajedrecista iraní Sara Khadem portada en la prensa de su país.Por su parte, Irán ha dado una gran importancia al torneo, por un lado, acudirá a la inauguración el presidente, Hassan Rouhani y por otro, presenta un ramillete de jugadoras de alto nivel, entre las que se encuentra Sara Khadem (en realidad su nombre completo es Sarasadat Khademalsharieh) de 19 años que en la clasificación mundial de la FIDE subió 11 puestos ocupando el puesto 27 con un coeficiente Elo de 2452.
Esta joven jugadora fue propuesta para recibir un premio al juego limpio tras lo acontecido en un torneo en la localidad rusa de Khanty-Mansiyska –donde se disputó la Olimpiada de Ajedrez de 2010-. Pactó tablas tras once jugadas con la ucraniana Natalia Zhukova, quien se encontraba muy afectada tras dejar en el hospital a la francesa Almira Skripchenko por un problema cardíaco.
Otras jugadoras iraníes destacadas que participarán en el campeonato son Mitra Hejazipour y Atousa Pourkashiyan.
Además este campeonato vivirá la tensión de la participación de jugadoras estadounidenses tras el anuncio de no permitir la entrada de personas procedentes de Irán en Estados Unidos y anunciarse la reciprocidad de esta medida por parte de las autoridades iraníes. Las estadounidenses Katerine Nemkova, Viktorija Ni y Sabina Foisor sí estarán en Teherán.
Por cierto, entre las 64 jugadoras no se encuentra ninguna española ya que no se han clasificado por lo que no se tienen que pronunciar al respecto aunque la campeona española, Ana Matnadze, de origen georgiano llegó a recomendar a las clasificadas “documentarse, informarse bien y consultar con otras jugadoras” antes de decidir si participan en el torneo.
Enlaces: