Los teléfonos móviles son a día de hoy objeto de múltiples investigaciones científicas para determinar los efectos en la salud de las radiaciones que emiten, informa Guadalupe Moreno de Statista, en la presentación de esta infografía sobre los distintos modelos en el mercado.
Sin embargo, la ciencia todavía no ha conseguido extraer ninguna conclusión definitiva sobre esta cuestión.
A pesar de ello, paradójicamente, las compañías de teléfono dan a conocer la cifra SAR (tasa de absorción) de sus modelos, es decir, la potencia en la que su radiación es absorbida por un tejido vivo, sin que nadie sepa al 100 % si esta provoca enfermedades.
Esta infografía de Statista muestra que el iPhone 7 tiene un SAR considerablemente mayor que muchos de sus competidores, con 1,38 vatios por kg, según datos de la publicación alemana Techbook.