Que Javier García, estudiante sordociego acusara a la compañía Ryanair de discriminarle por su discapacidad, ha servido para que el director general de Movilidad y Transporte de la Comisión Europea, Henrik Hololei, se comprometa a elaborar un código de buenas prácticas para el transporte de las personas con discapacidad y movilidad reducida, de forma que, nunca más vuelvan a suceder casos de discriminación como el que tuvo lugar la pasada navidad.
El primer sordociego con una beca Erasmus, pretendía regresar a su casa en Navidad y la compañía Ryanair le puso determinados impedimentos. Gracias a la protesta del CERMI que reunió en el Aeropuerto Adolfo Suárez-Barajas de Madrid a cientos de personas, se pudo hacer visible su causa.
Hololei ha reconocido que las personas con discapacidad tienen el mismo derecho a utilizar el transporte aéreo que los demás pasajeros también de manera autónoma, y no se les puede denegar el transporte.