La Unidad Interactiva del Diccionario de la Real Academia (DRAE) ha comunicado al criminólogo Miguel Ángel Gallardo Ortiz que una propuesta[1] sobre la voz o acepción «mermelero» será estudiada y valorada para su posible inclusión en la vigésima cuarta edición del Diccionario.
Explica Miguel Ángel Gallardo Ortiz en su propuesta que «mermelero» es una palabra muy utilizada en América, y con gran frecuencia en el Perú, para designar a corruptos que abusan de su propio empleo o cargo para beneficiar a quienes les pagan con dinero o en especies y cualquier tipo de dádiva o compensación.
Y añade que el término «mermelero» se empezó a popularizar por «los históricos antecedentes peruanos de la televisión panamericana.pe contra toda ética periodística en la política peruana que se remontan, al menos, a las turbias relaciones de Ernesto Schütz Landázuri con Vladimiro Montesinos por las que recibió sumas de varios millones de dólares» documentados en numerosas noticias y en videos como por ejemplo Vladivideo 05 entre Schutz y Montesinos.
Explica Miguel Ángel Gallardo que la expresión “periodista mermelero” es poco usada en España a pesar de que se han publicado escándalos de corrupción periodística de gran alcance, y que el sentido latinoamericano del término «mermelero” se tipifica en el Código Penal como “corrupción entre particulares” en el Artıculo ́ 286 bis.
Y añade que el problema para detectar y poder acusar de corrupción periodística «es la prueba», y que el «escaso, torpe y corto desarrollo de la criminalística para los delitos del periodismo deja en la impunidad los más descarados abusos del privilegio y el medio del periodista corrupto.
A través de la Asociación para la Prevención y Estudios de Delitos, Abusos y Negligencias en Informática y Comunicaciones Avanzadas (Apedánica), Gallardo propone nuevas técnicas periciales para evidenciar la corrupción periodística de quienes merecen llamarse “periodistas mermeleros”.
Derechos aludidos y medios de comunicación
En dictámenes periciales desde Apedánica, Miguel Ángel Gallardo defiende que en España hay normativas que regulan el derecho a la rectificación y la protección de datos personales que mantienen «muy controvertidos equilibrios entre el derecho al honor y a la propia imagen del artículo 18 de la Constitución, con el poder dar y recibir información veraz en relación a la libertad de expresión del artículo 20 de la Constitución que se corresponde con el 19 de la Carta de las Naciones Unidas».
Y sostiene que en España, las alusiones directas a personas en medios de comunicación por «periodistas mermeleros» deben merecer algo más que una rectificación, porque «el aludido tiene derechos, al menos, morales, más allá de lo que posibilitan leyes antiguas y ya desfasadas por los más agresivos negocios audiovisuales y por Internet».
Argumenta esta afirmación en que «a la vista de la jurisprudencia, se constata que hay demasiados jueces y tribunales completamente ignorantes de cualquier posible ‘derecho de aludidos’, pero también hay interesantes referencias jurisprudenciales a las alusiones en beneficio de aludidos a los que se ha negado toda réplica. Las alusiones más paradigmáticas se producen en medios de comunicación de máxima audiencia en perjuicio de particulares que no tenemos acceso a ninguna publicación».
Juan Luis Cebrián propone
Falta explicar en relación al inicio de esta información que la propuesta hecha por Miguel Ángel Gallardo a la RAE para estudiar la inclusión de «mermelero» en el DRAE surgió del periodista Juan Luis Cebrián.
Como colofón de una conferencia impartida en la sede de Deusto Business School el pasado 27 de mayo (2019), Miguel Ángel Gallardo interpeló a Juan Luis Cebrián por su criterio sobre el concepto de «periodista mermelero» que se utiliza en el ámbito hispánico americano.
Gallardo expuso que el interés personal por la acepción de «periodista mermelero» venía de su condición de Doctor en Filosofía, cursada en el Departamento de Filosofía del Derecho, Moral y Política (Ética y Sociología), y le consideraba el interlocutor adecuado por su currículo de gestión en el Grupo Prisa y su condición de Académico de la Lengua.
La respuesta de Cebrián fue indicar a Gallardo la posibilidad de que hiciera directamente una propuesta a la RAE para el estudio de esa voz y su posible incorporación al DRAE, gestión que finalmente ha encontrado un cauce y podría materializarse en la próxima edición del diccionario.
El término peruano «mermelero» es equivalente al mexicano «chayotero»