La histórica y romántica Torre Eiffel ha procedido a una renovación de un primer nivel con la instalación de un suelo de vidrio que permite ver la ciudad de París a 57 metros de altura, informa Andes.
El suelo opaco del primer nivel fue reemplazado por el suelo de vidrio que da una sensación de vértigo, al igual que la reja de protección por una pared de vidrio inclinada hacia el vacío.
La inversión en este proyecto, que permitió ampliar a media hectárea la capacidad de personas, fue de 30 millones de euros, duró casi dos años y nunca cerró sus puertas durante la remodelación.
También se incorporó un recorrido museográfico que permite el conocimiento del monumento histórico: «El objetivo es subir lo más rápido posible, es un circuito similar a un sistema sanguíneo», describe Wilhelm Dubelloy, alias «Wim», recepcionista en la torre desde hace 13 años.
Añadió que “cada siete u ocho minutos, dos ascensores de dos niveles emprenden su rotación entre el suelo y el segundo piso. Para seguir subiendo hay que tomar uno de los «duolifts» que llevan al tercero”.
La Sociedad de Protección de la Torre Eiffel (SETE) espera que esta modernización aumente las visitas, sobre todo a los espacios de tienda y restaurante. La altura total de la Torre con las antenas es de 324 metros, la segunda planta se encuentra a 115 y la tercera a 276.