Luis de Luis[1]
Una vez más Los Absurdos Teatro se enfrentan a la realidad, toman distancias, la miden, la calibran y la estudian. Una vez han formado sus conclusiones se miran y vuelven a mirar a la realidad; y entonces la cuentan, la dicen, en verso y prosa, tal y como es en la realidad.
Es decir, que cuentan la realidad de la realidad.
Y lo hacen a su manera, claro. La manera de quienes tienen el teatro en las venas y la comedia en sus glóbulos rojos. Alfonso Mendiguchía y Patricia Estremera se miran, se rezuman y entran en combustión para contar las pelea desigual e injusta de un matrimonio contra un banco que les sentencia y quiere ejecutar una hipoteca y ejecutarles en vida convirtiéndoles en nada.
En verso, en prosa, en sainete, en tragedia, en lágrima, en risa, en pantera, en rosa, en guiño, en tonto, en bobo, en pica, en resca, en tu y en yo, en Estremera y en Mendiguchía; “Gruyere” se desliza y despliega entre el sainete y el apólogo, entre Berlanga y Quevedo, provocando, incordiando y entreteniendo al espectador.
Y esta función intrincada, moral y compleja, intensa y humana que utiliza muchas técnicas, muchos lenguajes, muchos estilos y muchos tonos no sería posible sin la labor de César Maroto que la resuelve haciendo fácil y fluido un montaje tan intenso como inteligente de sos que meten el dedo en la llaga y no se cansan de escarbar hasta sacar fuera la realidad de la realidad.
Para que reluzca en todos sus flamantes absurdos, mezquindades y miserias.
1.- Luis de Luis es crítico teatral
Ficha artística
Reparto: Patricia Estremera y Alfonso Mendiguchía.
Dirección: Cesar Maroto
Diseño de iluminación y escenografía: Víctor Mones
Diseño de vestuario: Remedios G. Insua
Música original: David Bueno
Diseño gráfico/visual: Manolo Pavón
Vídeo: El Ojo Mecánico
Animaciones: Eduardo Avanzini
Comunicación y prensa: Rosa Arroyo y Almudena Paredes
Marketing: Saray Neila
Distribución: Paz Álvarez
