Una llamada a la movilización para evitar una generación perdida en Siria
Unicef, Acnur, Save the Children, World Vision y otras organizaciones internacionales que entre sus objetivos tienen la defensa de los derechos de la infancia, han hecho un llamamiento a la movilización masiva de la ciudadanía y de otras organizaciones humanitarias, en favor de los niños sirios y para apoyar la iniciativa “No lost generation”, que intenta que todos los afectados por el conflictos en ese país puedan tener un futuro más seguro y estable.
La iniciativa, que pretende recolectar mil millones de dólares para programas educativos y de protección, de capital importancia para sacar a los niños sirios de la precariedad, el aislamiento y los traumas causados por la guerra, se hará pública en un conferencia que el 15 de junio de 2014 va a reunir en Kuwait a los principales proveedores de fondos internacionales, y se pondrá en marcha junto a una campaña de movilización a a través de las redes sociales.
“Mientras el conflicto se acerca a otro doloroso aniversario, no podemos permanecer de brazos cruzados y ver como ante nuestros ojos desparece una generación entera”, ha dicho el director general de Unicef, Anthony Lake. “Ha llegado el momento de que el mundo actúe y ofrezca a esos niños la posibilidad de tener de nuevo confianza en el futuro. Si ahora faltamos a nuestro compromiso con esos niños, toda una región va a perder una generación de dirigentes, ingenieros, profesores, médicos y, sobre todo, potenciales artesanos de paz; una generación en la que repose la esperanza de una sociedad estable, sana y próspera”.
Durante cerca de tres años, los niños sirios han sido los más vulnerables del conflicto, recuerdan las cuatro organizaciones que hacen este llamamiento. Esos niños han asistido a la muerte de miembros de sus familias y amigos, han contemplado la destrucción de sus escuelas y han visto como se esfumaban sus esperanzas. Han sufrido heridas físicas y psicológicas, se han vuelto vulnerables a las peores formas de explotación, incluido el trabajo de menores, el reclutamiento por parte de grupos y fuerzas armadas, los matrimonios precoces y otras formas de violencia.
Más de un millón de los refugiados sirios son niños y 425.000 menores de cinco años. La mayoría de los refugiados han huido a Líbano, Jordania, Turquía, Egipto o Irak. Se estima que unos 8.000 de esos niños permanecen separados de sus familias. Y aún es más desastrosa la situación de más de tres millones de niños desplazados en el interior de Siria.
Acnur, Unicef, Save the Children, World Vision y otros colaboradores de la región se encargarán de canalizar los mil millones de dólares que se espera recoger en esta campaña hacia programas que, en colaboración con los gobiernos y comunidades locales, permitirán una educación con total seguridad, protección contra la explotación, los malos tratos y la violencia, cuidados asistenciales y apoyo psicológico, y favorecerán una mayor posibilidad de cohesión social y estabilidad en una región tan frágil. La iniciativa ampliará también el acceso a una educación de calidad, poniendo en marcha programas acelerados para los niños que han dejado de asistir a la escuela, así como programas de formación profesional para maestros y profesores.
“Los niños de Siria han soportado horrores cotidianos inimaginables y sus sueños de futuro corren el peligro de pulverizarse”, ha dicho Lake para impedir la pérdida de esta generación hace falta más apoyo, compromisos más importantes y audaces y una solidaridad renovada que eviten un ciclo continuado de violencia, odio e intolerancia en una región que ha sufrido demasiado”
Hashtags de la campaña :#Nolostgeneration y #enfantssyriens.