En un hecho con escasos precedentes, Marruecos, a través de su embajada en Ruanda, ha contestado a las informaciones del diario ruandés The New Times en referencia al conflicto del Sahara. El diario, tras la entrevista mantenida por el presidente de Ruanda y actual representante de la Unión Africana, Paul Kagame con el enviado especial de la ONU para el Sahara, el alemán Horst Kohler, mencionaba que una parte del Sahara “estaba controlada por la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), y otra ocupada por Marruecos”.
El portavoz de la embajada marroquí, Amine Ahmed-Ayoube, mandó un escrito de rectificación al diario explicando que, cuando se produjo la independencia de Marruecos en 1956, “había una triple colonización, por Francia, por España en el norte y sur, y por la administración internacional que controlaba la ciudad de Tánger”. Mencionan que tras negociaciones “se restituyeron las regiones de Tarfaya y Sidi Ifni en 1958 y 1969, respectivamente”.
Asimismo, argumenta sobre el Sahara que, en 1975, “España se retiró del territorio, y que el 14 de noviembre, tras negociaciones, se firman los Acuerdos de Madrid entre España, Marruecos y Mauritania, citando que la asamblea general de Naciones Unidas toma nota de estos acuerdos mediante la resolución 3458/B de 11 de diciembre de 1975”.
Sin embargo, no hace alusión a lo que menciona el mismo diario: que el Sahara se encuentra en la lista de territorios no autónomos de Naciones Unidas desde 1963.
The New Times es un diario creado en 1995, después del genocidio tutsi, y es considerado un medio progubernamental. Precisamente, Marruecos, que quiere formar parte del Consejo de Paz y Seguridad de la Unión Africana, donde se sigue el conflicto saharaui, considera al presidente de Ruanda, Paul Kagame, un aliado en el asunto del Sahara y de hecho, le fue otorgado un premio en el fórum MEdays, celebrado en Tánger en 2015.
Kagame, quien salió reelegido el año pasado con el 99 por ciento de los votos, para un tercer mandato, hasta 2024, fue procesado por jueces de Francia y España por crímenes de guerra pero no puede ser juzgado al ostentar el cargo de presidente.
La exfiscal del Tribunal Penal Internacional de Ruanda (TPIR), Carla del Ponte, fue destituida de su cargo al querer investigar los crímenes del Frente Patriótico Ruandés que fundó Kagame.