Alrededor de las 23:00 de este miércoles 29 de julio de 2015, una bomba panfletaria explotó en los exteriores del diario público El Telégrafo en la ciudad de Guayaquil, informa Andes.
El fuerte estruendo alarmó al personal que aún se encontraba trabajando, informó el medio de comunicación.
El panfleto del autodenominado «Frente de Liberación Nacional» está firmado por un «Comandante Ramiro». Y alerta que se trata de un «primer comunicado».
Recalca además que «la Revolución Ciudadana es oportunista», reseña una nota periodística.
«La primera salva ha sido enviada, seguiremos fortaleciendo los cuadros con jóvenes que se frustan con el tiempo perdido y quieren luchar por un Ecuador mejor», también se lee en el panfleto.
También se atribuyen por la colocación de la bomba que explotó hace un par de semanas en la sede del movimiento Alianza PAIS.
Orlando Pérez, director de El Telégrafo, dijo a la cadena Ecuavisa que no entendía las razones del atentado, rechazó la violencia y anunció que se iniciará una exhaustiva investigación del hecho.
En tanto, el vicepresidente de la república, Jorge Glas, deploró el incidente. «¡Todos debemos rechazar la violencia! El pasado no volverá», escribió el dignatario en su cuenta de Twitter@JorgeGlas.
Otras expresiones de solidaridad se registraron en Twitter por parte del secretario de Comunicación, Fernando Alvarado, quien manifestó «solidaridad y ánimo #LosViolentosNoPasaran». Mientras, la secretaria de Gestión Política, Viviana Bonilla, repudió los actos violentos y expresó su solidaridad con El Telégrafo.Sobre la medianoche, diario El Universo informó sobre la explosión de un artefacto similar en las inmediaciones del rotativo, al sur de Guayaquil.
