Autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) de Oaxaca, México, informaron de la localización del cadáver del periodista Alberto López Bello, del diario “El Imparcial”, que fue encontrado este miércoles junto al cuerpo de otra persona, informa Cerigua.
Los cuerpos de López Bello y un policía, fueron encontrados en el paraje Las Humedades, en Viguera; ambos presentaban lesiones contundentes y cerca de ellos fueron encontrados pedazos de madera y piedras con rastro de sangre.
El fallecido trabajaba en “El Imparcial” desde hace aproximadamente seis años en la sección policial; un periodista del medio afirmó que este martes había llegado a trabajar al diario.
Gabino Cué Monteagudo, gobernador de Oaxaca, giró instrucciones al procurador general de Justicia, Manuel de Jesús López López, para que este crimen se dictamine como delito de alto impacto y se canalice a la Mesa Especial para la Atención de Periodistas, a fin de esclarecer el crimen con el apoyo, en su caso, con la Procuraduría General de la República (PGR).
Personal del grupo de homicidios de la Agencia Estatal de Investigaciones de la PGJE así como de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), se trasladaron al lugar donde fueron encontrados los cadáveres para iniciar las investigaciones.
Por su parte “El Imparcial” lamentó el asesinato de López Bello y exigió a las autoridades el pronto esclarecimiento del crimen, el cual demuestra la vulnerabilidad a la que están expuestos los comunicadores.
Durante la tercera semana de mayo, López Bello junto a su compañero Jacobo Robles fueron detenidos por agentes de la Policía Estatal, cuando daban cobertura a una pancarta colocada por supuestos miembros del crimen organizado.
Los periodistas fueron detenidos sin motivo alguno y luego de permanecer alrededor de cinco horas detenidos, fueron liberados cuando la delegada de la PGR indicó que no habían cometido ningún delito.
RSF señala al narcotráfico
Reporteros sin Fronteras informa de que Alberto López Bello y el agente policía Arturo Alejandro Franco Rojas, quien tenía 26 años de edad y trabajaba en el área de inteligencia de la policía municipal de Oaxaca, fueron vistos por última vez un poco antes de que aparecieran muertos, en un bar del centro de la ciudad de Oaxaca.
«Solicitamos a las autoridades encargadas de la investigación que determinen rápidamente el móvil de este crimen e identifiquen a sus autores”, expresó Reporteros sin Fronteras. «El asesinato de Alberto López Bello, a quien rendimos homenaje, recuerda una vez más los peligros a los que se exponen los periodistas y los medios de comunicación que trabajan sobre temas delicados, como el narcotráfico. En ese sentido, reconocemos el valor de la dirección de El Imparcial, que ratificó su compromiso de seguir informando, a pesar de las intimidaciones y de las tragedias a las que se enfrenta con frecuencia”, subraya la organización.
El 8 de octubre de 2007 dos desconocidos atacaron un vehículo que trasladaba ejemplares de El Imparcial; mataron a balazos a tres voceadores. La dirección de periódico atribuyó este ataque a los narcotraficantes y lo consideró una represalia por la información que el diario había publicado.
México ocupa junto con Brasil el puesto del país más mortífero del continente para la profesión periodística desde el inicio del año. En el primer país, en lo que va de 2013, se han registrado dos casos de periodistas asesinados, en los que el crimen estuvo relacionado con su profesión, así como otros dos de periodistas desaparecidos. En el segundo, cuatro periodistas han perdido la vida.
En la última década en México han sido asesinados 88 periodistas y otros 17 se encuentran desaparecidos; 26 de ellos se encuentran actualmente fuera de su región o en el exilio.