Mujeres olvidadas por la historia; esas científicas cuyos logros pasaron al cajón del olvido y sin cuya aportación la ciencia no hubiera sido la misma. Mujeres que vieron usurpados sus respectivos nombres detrás de hombres que sí se vieron reflejados en los libros eso que tenía que ver con la investigación y la ciencia.
Esas mujeres que hoy figuran en el libro «Mi científica favorita» está editado por el Instituto de Ciencias Matemáticas (ICMAT). El contenido pretende ser una obra de divulgación y ha sido recopilado por 18 centros escolares.
«El número de mujeres investigadoras sigue siendo muy inferior al de hombres y, a medida que se avanza en las diferentes etapas de la carrera científica, la proporción se desequilibra más», denunció el Icmat quien agregó que con este libro se pretende que los estudiantes reconozcan el trabajo de las mujeres en el campo científico y desmentir el tópico de que la ciencia sea ‘cosa de hombres’.
Desde Ada Lovelace cuyo algoritmo capaz de ser procesado por una máquina iniciara el comienzo de la informática, hasta mujeres contemporáneas que están pero que aún, nunca se las nombra; y otras mujeres que no culminaron su obra en España, sino que tuvieron que marcharse a otros países en donde sí fueron reconocidas y pudieron investigar.
El próximo reto será para el siguiente curso escolar y se lanzará la segunda edición en la que participarán otras escuelas. Los alumnos de quinto y sexto han investigado sobre la vida de varias científicas históricas y contemporáneas, y ahora se disponen a incluir a aquellas que todavía no están incluidas.
El libro estará colgado en la web de la institución y se repartirá en los colegios participantes.