La alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, ha instado a las autoridades de Ecuador a garantizar el derecho de todas las personas a manifestarse pacíficamente “protegiendo los derechos a la libertad de expresión y opinión, a la reunión pacífica y a participar en los asuntos públicos”.
Michelle Bachelet recuerda que el uso de la fuerza en la represión de manifestaciones está reservado a casos excepcionales y que el Estado tiene la obligación de aislar a quienes actúan con violencia.
La iniciativa de Bachelet responde al «estado de excepción» decretado el jueves 3 de octubre de 2019 por presidente de Ecuador, Lenin Moreno, tras los disturbios que se produjeron por la introducción de un paquete de medidas económicas que elimina subsidios estatales que se han traducido en una subida de los combustibles y diversos recortes sociales.
“Al resguardar el derecho a la manifestación pacífica, la policía tiene el deber de identificar las personas que actúan con violencia para aislarlas de los demás manifestantes. Los actos de violencia o delitos que cometan algunas personas no deben atribuirse a otras cuyo comportamiento es pacífico”, destaca un comunicado hecho público por la Oficina de la Alta Comisionada de la ONU.
La Oficina recuerda que solamente debe aplicarse el uso de la fuerza “en casos excepcionales” y que se han de acatar los principios de “legalidad, necesidad, proporcionalidad y responsabilidad”, e indica que cualquier modo de privación de libertad debe regirse por los principios establecidos en el derecho internacional.
La Oficina mostraba así la preocupación que producen los actos de violencia que las fuerzas de seguridad ecuatorianas habrían cometido contra los manifestantes, al tiempo que “rechaza enfáticamente” los sucesos violentos cometidos por terceras personas tales como “agresiones, destrucción de bienes públicos y privados, saqueos, bloqueos de la vía pública, entre otros”.
António Guterres respalda el mensaje de Bachelet
Posteriormente, el portavoz del Secretario General de las Naciones Unidas se sumó a la petición de la Alta Comisionada e indicó que las autoridades encargadas de mantener el orden público deben garantizar el derecho de todas las personas a manifestarse pacíficamente.
Durante su encuentro diario con los medios de comunicación, Stéphane Dujarric, destacó que “las personas deben poder expresar sus opiniones y reunirse pacíficamente. El uso de la fuerza debe ser proporcionado de conformidad con el derecho internacional”.
Por su parte, la relatora especial sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, Victoria Tauli-Corpuz, manifestó su inquietud por la situación de los pueblos indígenas ecuatorianos dentro del marco de las protestas en el país sudamericano.
En un mensaje en la red social Twitter, Tauli-Corpuz urgió al Gobierno ecuatoriano a evitar el uso excesivo de la fuerza, respetar los derechos humanos y a buscar una vía negociada al conflicto mediante el diálogo intercultural
Que lenguaje tan fino y comedido el de la Bachelet para con el Gobierno ecuatoriano en la represión de los manifestantes. Muy bonito y elegante, algo así como el que se usa en los festejos diplomáticos de gala. No se parecen en nada a la expresa arremetida contra Venezuela dónde los manifestantes encapuchados dispararon, lanzaron bombas molotes, quemaron vivos a transeúntes, asaltaron y quemaron clínicas y hospitales, destrozaron bienes públicos etc., etc.