El reportero gráfico italiano Andrea Rocchelli y su asistente e intérprete ruso, Andrei Mironov, fueron heridos de muerte por fuego de mortero cerca Sloviansk, en la región oriental de Donetsk, Ucrania, el 24 de mayo.
En el mismo ataque resultó herido en las piernas el fotógrafo francés William Roguelon, que trabaja para la agencia Wostok Press y estaba con ellos, informa Reporteros Sin Fronteras (RSF).
«Quisiéramos expresar nuestra profunda tristeza y ofrecer nuestro más sentido pésame a las familias de las víctimas», ha dicho la directora de investigación de RSF, Lucie Morillon.
«Estamos consternados por la muerte de estos dos experimentados profesionales. La crisis en el este de Ucrania es cada vez más violenta y peligrosa para los periodistas que la cubren. Hacemos un llamamiento a todas las partes en conflicto para que respeten el trabajo de los periodistas, independientemente de las políticas editoriales de los medios para los que trabajan. Es el derecho del público a la información lo que se ve amenazada cuando se apunta hacia el periodista», sostiene Lucie Morillon.
Rocchelli, Roguelon, Mironov y su chófer se vieron atrapados en un fuego cruzado en Andreievka, un pueblo a pocos kilómetros al sur de Sloviansk, en la tarde del 24 de mayo. Roguelon dijo que «se dispararon entre 40 y 60 proyectiles de mortero «, y que uno de ellos fue a parar a la zanja en la que se habían puesto a cubierto.
Aunque herido en las piernas, Roguelon pudo huir y cruzar las líneas rebeldes blandiendo su cámara. Los vecinos lo llevaron al hospital de Andreievka. Tras un período de incertidumbre y de informes contradictorios, el Ministerio de Exteriores italiano confirmó la muerte de Rocchelli. Los familiares aún no han identificado su cuerpo ni el de Mironov.
Desde que fundó el colectivo de fotógrafos Cesura junto con otros cuatro fotógrafos en 2008, Rocchelli había cubierto el conflicto de Afganistán y la primavera árabe en Túnez y Libia. También trabajó en Kirguistán y el Cáucaso. Vivía entre Milán y Moscú, y trabajó para importantes medios occidentales -como Le Monde, L’Espresso o Foreign Policy-, así como medios de comunicación rusos, como Novaya Gazeta y Kommersant.
Había estado en el este de Ucrania durante varias semanas acompañado de Mironov, activista de derechos humanos, miembro de la ONG rusa Memorial y exdisidente soviético, quien había aprendido italiano en un campo de trabajo y colaboraba a menudo con periodistas italianos.
Un total de 218 periodistas han sido agredidos o heridos en Ucrania en los primeros cuatro meses de este año, pero Rocchelli y su intérprete son los primeros trabajadores de medios que mueren en el conflicto, informa RSF.
Los enfrentamientos entre las fuerzas armadas de Ucrania y los rebeldes contrarios a Kiev son cada vez más violentos. El clima se tensó de forma especial en la víspera de las elecciones presidenciales del 25 de mayo. Un equipo del canal de televisión bielorrusa Belsat también quedó atrapado en fuego cruzado en un puesto de control cerca de Sloviansk el 24 de mayo. Se efectuaron disparos contra su automóvil un par de horas más tarde sin que ninguno de los periodistas resultase herido.