Tal como sostiene Miguel Riera en el prólogo de este muy recomendable libro para todos los que se interesen por el decisivo valor de la educación en la estabilidad y el porvenir democrático y cultural de la naciones, los cambios de modelo educativo establecidos en los últimos años son una consecuencia o un complemento –según se mire- del ataque neoliberal al llamado estado de Bienestar que venimos soportando.
La comunidad educativa en España no fue todo lo consciente que debiera a lo afirmado en el párrafo anterior. Al tiempo que se defendía la enseñanza pública, se asistió de un modo pasivo al desguace de valores que supuso dar por rarezas minoritarias los que estaban implícitos en la esencia del conocimiento y la cultura. La izquierda política en España, bien sea por ignorancia o por desidia -o por ambas-, ha contribuido eficazmente a ello. Por eso Nos quieren más tontos nos señala que toda acción educativa es una elección política, tal como nos exponen los autores.
Las líneas cruciales de cualquier política educativa están directamente conectadas con una determinada visión del mundo. Forman parte, por ello, de un proyecto global que pretende modelar la sociedad del porvenir. La educación impuesta en Occidente, desde hace ya bastantes años, es una educación en la que el conocimiento queda relegado ante lo que ha venido a denominarse “competencias”. Se trata de un modelo educativo pensado para satisfacer exclusivamente necesidades empresariales, en el que –según Jacques Delors-, el llamado “saber hacer” debe sustituir al “saber”.
Esa política educativa ha sido fomentada, obviamente, por el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional y la Organización Mundial de Comercio, a fin de lograr una sociedad del conocimiento…sin conocimiento -tal como afirman Pilar Carrera y Eduardo Luque-, una sociedad sometida al mercado, que es quien establece tanto los contenidos como las herramientas a utilizar en el aprendizaje. La escuela, el instituto y la universidad se están convirtiendo en centros esenciales de la estructura económica, pero cada vez más imposibilitados de permitir un acceso al saber -en su más hondo sentido- que nos conduzca a comprender el mundo y por consiguiente a intentar transformarlo.
Los autores dividen su trabajo en cuatro bloques. En el primero se explica el modelo educativo neoliberal . Los organismos internacionales son analizados al respecto en el segundo bloque, con apartados dedicados a la UNESCO, la Banca Mundial, el FMI, la OMC y la OCDE. En el tercero se explican las claves teóricas del nuevo orden educativo, el concepto de capital humano y la economía cognitiva, así como la evaluación del capital humano. Los nuevos hitos educativos ocupan el cuarto bloque del libro.
- Nos quieren más tontos. La escuela según la economía neoliberal
Carrera Santafé, Pilar y Luque Herrero, Eduardo
El Viejo Topo, 2016