Desde la caída del dictador Alfredo Stroessner en 1989, en Paraguay fueron asesinados 17 periodistas, y a la vez aumentó la concentración de la propiedad mediática «en pocas manos a través de grupos empresariales» informó el Sindicato de Periodistas de Paraguay (SPP) al exponer los principales temas de preocupación de los comunicadores de ese país en la conmemoración, el 26 de abril, del Día del Periodista, señala una comunicación de Ciap-Felap.
Los periodistas y trabajadores de medios de comunicación se concentraron en Asunción junto al monolito que recuerda a Santiago Leguizamón, primer periodista asesinado en Paraguay tras la dictadura, de cuyo homicidio ese mismo día se cumplieron 25 años. El SPP destacó que la gran mayoría de los asesinatos contra periodistas «se encuentran en la más absoluta impunidad, sin juicio ni castigo para los responsables».
El sindicato también lamentó la ausencia de esfuerzos por parte del Estado para esclarecer estos crímenes y evitar que se repitan, y lamentó que ni la Policía Nacional ni el Ministerio del Interior hayan refrendado un protocolo de seguridad para periodistas.
Ernesto Carmona, presidente Ciap-Felap, añade que, según la versión de la agencia española EFE, el sindicato advirtió, además, del «acaparamiento de medios en pocas manos» tras la «irrupción en el mercado del grupo empresarial del presidente Horacio Cartes, quien en poco tiempo se hizo de varios multimedios a través de la figura de su hermana Sarah Cartes».
«El titular del Poder Ejecutivo, además de detentar el poder político y económico, es propietario de un oligopolio mediático dedicado a promocionar su figura y denostar la disidencia, en especial las organizaciones sociales críticas a su gestión, las más de las veces a través de la descalificación e incluso la mentira, emulando los métodos de propaganda gubernamental de la dictadura», afirma el SPP. El sindicato destaca que esta situación es «incompatible con la democracia» y constituye «una violación de la libertad de expresión de los periodistas» y del derecho de los ciudadanos a «recibir información de fuentes plurales».
Agrega que la concentración mediática también agudiza la precarización laboral y reduce el mercado de trabajo, a lo que se suma la pérdida del poder adquisitivo del salario de los trabajadores de prensa, que deteriora su calidad de vida. Por último, los periodistas criticaron los «constantes ataques del Gobierno a los sindicatos», que amparan «las violaciones laborales cometidas por la patronal», y pidieron un «inmediato aumento salarial» en el gremio, y el respeto a su libertad sindical.
La Comisión de Atentados a Periodistas (Ciap-Felap) de la Federación latinoamericana de Periodistas, tiene registrados siete asesinatos de periodistas en Paraguay en los últimos diez años.