En julio de 2024 el Instituto Nacional de Estadística hizo una encuesta que arrojó unos resultados sorprendentes: a lo largo del próximo trimestre, el 24,1 por ciento de empresas preveían unos resultados más que favorables. Por el contrario, tan solo el 15,2 por ciento se mostraban muy negativos al respecto.
Varios aspectos dan pie a que los empresarios sean positivos al respecto. Uno de ellos guarda relación con el mantenimiento: si lo llevan a cabo cuando toca, los resultados obtenidos en el negocio no se resienten de manera considerable, por lo que pueden seguir adelante con sus respectivos proyectos. Por desgracia, no es el caso de ciertas empresas que, con tal de ahorrar costes, no dan al mantenimiento la importancia que merece.
Lo cierto es que en pleno 2024 adquiere una especial relevancia. No solo nos referimos al mantenimiento correctivo, sino también al preventivo que está pensado para evitar el surgimiento de problemas, mientras que el primero que hemos mencionado consiste básicamente en actuar cuando se produce la adversidad.
Hoy nos centraremos en el último que acabamos de traer a colación, para el cual existe un software de mantenimiento correctivo muy recomendable para empresas de todos los sectores.
Cada vez son más numerosos los negocios que no se lo piensan dos veces a la hora de implementarlo. Y no es para menos, puesto que son conscientes de que con su ayuda podrán llevar a cabo un óptimo mantenimiento correctivo que presenta una serie de pros y contras. Seguidamente, profundizaremos en todos ellos.
Aspectos positivos del mantenimiento correctivo
Antes de ahondar en las ventajas que proporciona, conviene averiguar exactamente en qué consiste el mantenimiento correctivo. En concreto, se basa en dar al activo de la empresa la solución requerida cuando está presentando algún tipo de anomalía. En la mayoría de ocasiones se trata de reparaciones, pero hay algunos casos que exigen una sustitución.
No siempre los mantenimientos correctivos son no planificados. Algunas empresas, cuando detectan que alguno de sus activos está empeorando progresivamente pero todavía sigue funcionando, deciden programar una futura acción de reparación o sustitución a pesar de que no tenga lugar con inmediatez.
Aun así, es reseñable que la mayoría de acciones de mantenimiento correctivo tienen lugar sin planificación de ningún tipo. Cuando se lleva a cabo, si la solución por la que se decanta el negocio es la sustitución del activo que está fallando, esto se traduce en que la empresa se actualiza en términos tecnológicos, con todo lo positivo que ello conlleva.
A su vez, es reseñable que reparar un activo o sustituirlo por otro proporciona a la empresa una impagable sensación de tranquilidad. Y no es para menos, puesto que se obtiene un período de garantía que varía en función de diversos aspectos.
¿Recuerdas que antes hemos hablado del mantenimiento preventivo? El correctivo tiene una gran ventaja frente al que consiste en programar las acciones a llevar a cabo para evitar problemas a corto, medio y largo plazo: el menor desembolso a efectuar. En líneas generales, el importe a abonar para solucionar un problema que ya ha surgido es inferior al que habría que destinar a mantener preventivamente todos los activos del negocio.
Aspectos negativos del mantenimiento correctivo
No todo es positivo al hablar del mantenimiento correctivo. De hecho, presenta varias desventajas que son precisamente los aspectos más beneficiosos del mantenimiento preventivo.
En primer lugar, ten en cuenta que la imprevisibilidad puede pasar factura a la empresa afectada. No saber cuándo se producirá una adversidad que derive en la interrupción del servicio a veces llega a ser muy perjudicial.
Supón que una máquina fundamental para la productividad del negocio se rompe en plena época de Black Friday, justo la semana en la que hay que tratar con más pedidos. El revés puede suponer importantes pérdidas para el negocio que, con un mantenimiento preventivo, no se producirían.
Estableciendo de nuevo una comparación con el preventivo, hay que decir que el correctivo es peor en lo que respecta a la productividad. Los activos de la empresa poco a poco van viendo decrecido su índice de buen funcionamiento, mientras que el preventivo se anticipa a ese tipo de efectos adversos.
Por otra parte, con el preventivo la empresa casi siempre sabe qué importe tendrá que desembolsar para mantener sus activos en un estado óptimo. Todo lo contrario sucede con el correctivo, con el cual se desconoce el gasto que deberá hacerse para las reparaciones de las máquinas y del resto de elementos que forman parte de la empresa.
En definitiva, es innegable que el mantenimiento correctivo acarrea una serie de factores negativos. Aun así, la balanza se inclina a favor de los positivos, derivando en que poco a poco vaya engrosándose el número de empresas españolas que se decantan por llevarlo a cabo con la ayuda de un software específico, el cual se suma a otros que consideran indispensables como los programas de facturación electrónica que son necesarios para cumplir con la Ley Antifraude.