La orgía de las “tarjetas blacks”.
Rato y Cía no es una compañía de teatro, aunque forma parte del espectáculo de las tarjetas opacas, negras, “blacks” que han venido utilizando el grupito de los 86 en España, gracias a la fiesta y diversión que les proporcionó Caja Madrid.
Dicho grupo integrado por varias figuras de renombre (políticos de varios colores, sindicalistas…), entre integrantes del consejo de administración y de la comisión de control y 21 consejeros ejecutivos y directivos de dicha entidad consiguió fundirse en sus “orgías dilapidarías” 15, 25 millones entre 1999 y 2012. ¡¡¡ ¿Crisis?!!! ¡¡ ¿Qué crisis?!! Ellos iban sobrados…
Mucus, desde su inteligencia natural de un moco trata de explicarlo con claridad mocosa: los más altos cargos entre ellos Blesa deciden dar una tarjeta a los integrantes del grupito, beneficiándose entre ellos y también a los asambleístas, ofreciéndoles préstamos a muy bajo interés, con la intención de hacer de la democracia su bandera.
Así, “dándose entre ellos” la vida padre, democratizaron la corrupción a cargo del dinero de la entidad, a la que convirtieron con su buen criterio dadivoso y “mamandurrial” en un casino, jugando “preferentemente” con la vida de las personas.
Mucus recuerda aquella frase de políticos, empresarios de alto standing, banqueros y demás gente de categoría, que decía: todo el mundo ha vivido por encima de sus posibilidades… ahora es cuando queda todo claro: utilizan al mundo para robarle por encima de sus posibilidades, “dándose entre ellos democráticamente»…