Reporteros Sin Fronteras (RSF) y las organizaciones de medios de Azerbaiyán en el exilio, el Colectivo Voces Libres, Meydan TV, Toplum TV y Qazetci, lanzaron un campaña denunciando las condiciones inhumanas y detenciones de periodistas.
En concreto, se menciona el caso de la redactora jefe de Abzas Media, Sevinj Vagifgizi, de 36 años, que fue en su día beneficiaria de una beca de RSF en Berlín, a quien se le ha denegado un simple ventilador eléctrico para aliviar el calor extremo que sufre en su centro de detención de la capital azerí, Bakú.
Por este motivo, la campaña simbólica de envío de tarjetas postales vía internet, se denomina en español ‘Démosles aire de libertad’, (en inglés, ‘Flood them with fans’, jugando con las palabras: ‘Inundémolos de ventiladores’; en francés, ‘Offrons-leur un souffle de liberté’, ‘Démosles un soplo de libertad’ ).
Mientras que la mayoría de los detenidos cuentan con el apoyo de sus familias para recibir ventiladores durante el verano, la petición de Sevinj Vagifgizi fue rechazada por el director de la prisión, Elnur Ismayilov, que había puesto una condición para concedérselo: que dejara de escribir.
Vagifgizi ha seguido informando desde la cárcel sobre las condiciones de detención y las violaciones de los derechos humanos en prisión, un acto valiente que le ha valido ser castigada con crueldad. El ultimátum de Ismayilov constituye un acto flagrante de censura y represión.
Esta campaña se produce en un contexto de represión creciente en Azerbaiyán.

Al menos 25 periodistas están actualmente encarcelados, muchos de ellos vinculados a Abzas Media, Toplum TV y Meydan TV, que se han convertido en objetivos predilectos de las represalias del Estado totalitario que rige Ilham Aliyev.
Sevinj Vagifqizi y sus compañeras Nargiz Absalyamova y Elnara Gasimova llevaron a cabo una huelga de hambre durante varias semanas para protestar por el trato que las autoridades habían infligido al director de Abzas Media, Ulvi Hasanli, que fue puesto en régimen de aislamiento a pesar de una decisión judicial que ordenaba su regreso al centro de detención de Bakú.
En un incidente especialmente alarmante, la periodista Nargiz Absalamova fue agredida físicamente por negarse a ser trasladada a otra celda, una medida de castigo tomada por la prisión en represalia por su huelga de hambre.
“Esta campaña va mucho más allá de un simple ventilador, habla de dignidad, justicia y solidaridad internacional”, afirmó el coeditor jefe en funciones de Meydan TV, Orkhan Mammad. “Invitamos a periodistas, activistas y ciudadanos de todo el mundo a unirse a nosotros para hacer saber a Sevinj y a sus colegas que no están solos”.
RSF, Colectivo Voces Libres, Meydan TV, Toplum TV y Qazetci piden a los gobiernos democráticos y a las organizaciones internacionales que intensifiquen la presión sobre las autoridades azeríes para que liberen a todos los periodistas encarcelados y retiren los cargos políticos contra ellos; garanticen el acceso a los derechos fundamentales, en particular a la atención médica y a la protección contra los abusos y pongan fin a la represión sistemática contra Abzas Media y el resto de medios independientes.



