La localidad marroquí de Sidi Ifni, antigua colonia española, pide la liberación de ocho jóvenes que irrumpieron durante unas horas el 25 de julio de 2016 en un antiguo edificio propiedad del Ministerio de Asuntos Exteriores, pidiendo la nacionalidad española.
El grupo de jóvenes, descendientes de españoles, clamaban justicia, penetraron en la antigua Pagaduría, un edificio perteneciente al Ministerio de Exteriores español (curiosamente con el escudo preconstitucional en el exterior), subieron al tejado con banderas de España y desplegaron una pancarta escrita en español: ‘Queremos recuperar nuestros derechos’ y en inglés: ‘Pedimos al gobierno español que nos conceda nuestras demandas’.
Eran ocho: Mohamed Amazoz, Rachid Ben Madin, Idriss Aamara, Mbarek Firik, Ayoub Mdimigh, Yousef Hanad, Ali id Lahoucin y Mohamed Drbal.
Según señalaban, el artículo 23 del Código Civil para la adquisición de nacionalidad española, los descendientes de los que nacieron en Ifni tienen derecho a la nacionalidad igualándolo a los descendientes de judíos sefardíes y saharauis, presentando su solicitud en el plazo de tres años. Su portavoz añadió que su problema era con España y no con Marruecos.
Las autoridades marroquíes se apresuraron a ponerse en contacto con el consulado español de Agadir para pedirles permiso para acceder y así detener a los manifestantes y poder acabar rápidamente con sus reivindicaciones ante el temor de que más habitantes se sumaran a dicha protesta, permiso que les fue concedido. Se presentaron cargos de insultos a funcionarios públicos, resistencia a la autoridad, deterioro de bienes públicos y desobediencia civil.
Miembros de la comunidad marroquí en el extranjero, naturales de Sidi Ifni, participaron en una protesta en París el miércoles 3 de agosto de 2016 pidiendo la liberación de los ocho jóvenes. Los manifestantes exigieron a las autoridades españolas que asuman su responsabilidad con Sidi Ifni de acuerdo con la convención de 1969 y pidieron la libertad a los presos.
También en la ciudad, de unos 20 000 habitantes, hubo protestas de solidaridad el miércoles 3 por el grado de militarización existente, atacando la connivencia española en las acusaciones ‘fabricadas’ de los ocho detenidos que comparecieron ante el Tribunal de Primera Instancia de Tiznit este jueves 4. El juicio ha sido pospuesto una semana hasta el jueves 11 de agosto y se ha desestimado la libertad provisional de los detenidos que se encuentran en huelga de hambre.
El ministerio de Asuntos Exteriores y el ministro en funciones, José Manuel García Margallo, guarda silencio al igual que el Consulado español en Agadir. Hay que citar que en el desalojo militares marroquíes, al parecer, pisotearon la bandera española ante la presencia de autoridades consulares españolas.
La población de Ifni se queja de la «marginación sistemática» y ya vivió graves incidentes de orden público en 2008 y 2012. Los habitantes se quejan de que se desarrollan ciudades cercanas como Tiznit o Guelmim pero no Ifni.
Hay que recordar nuestra huella en Sidi Ifni, que fue colonia española entre 1934 y 1969. En la ciudad permanecen edificios de esa etapa como la citada Pagaduría que era el antiguo Consulado, la Plaza Hasán II, antigua Plaza de España; la iglesia de Santa Cruz, actual Palacio de Justicia, el antiguo Gobierno General, convertido en Palacio Real y el hotel España, actual Bellevue.
Durante el reino de Castilla se fundó la presencia española en Sidi Ifni en 1476 siendo abandonada en 1524. El sultán de Marruecos Mohamed IV, reconoció en 1860 ese antiguo asentamiento, aunque España no lo ocupó de forma efectiva por el coronel Capaz, en nombre del Gobierno de la Segunda República en 1934. En 1958 con la independencia marroquí y con Franco gobernando en España, Ifni fue declarada provincia española de ultramar siendo Sidi Ifni su capital hasta el 30 de junio de 1969, tras firmarse el Tratado de Fez del 19 de mayo de 1969.