El gran actor francés Jean Louis Barrault nos dijo a sus alumnos, en una clase magistral: “El teatro esta muerto. Viva el teatro!”
Y el teatro vive en el Micro Teatro del Centro Cultural Español (CCE) de Miami. Es una creación que llega de España, una forma teatral alternativa: un espacio pequeño, con una obra de teatro de 10 a 15 minutos, con actores en vivo, para apenas diez personas, un público reducido en un cuarto o en un contenedor viviendo la acción.
Esta fórmula ha hecho que el teatro viva y llegue a despertar un real interés no solo en España sino en México, Argentina, Costa Rica, Perú y ahora en Miami.
Recordemos que esta idea surgió en Madrid, en el 2009, por un grupo de directores, actores y autores que se reunieron en un prostíbulo abandonado con trece recámaras, un espacio cedido por Miguel Alcanud, coordinador del proyecto. Se llevaron a cabo, en los cuartos del burdel, obras breves escritas para este evento, que se representaban mientras había público.
Esta propuesta vanguardista, para todos los bolsillos y para todos los hispanohablantes, (ahora anglosajones también), se ha instalado en Miami, para quedarse.
“Esta idea fue traída al Centro Cultural Español en el 2012 por Jorge Monge”, me comenta Maité de la Torre, coordinadora general del Centro Cultural Español.
El éxito ha sido inmediato. Hispanos diversos, de diferentes países latinoamericanos, distintas edades y poder adquisitivo llegan hasta el patio de CCE y compran sus entradas, para ver su mini función, en los siete contenedores pintados que se encuentran en el patio-jardín.
Para los directores, autores y actores es una plataforma donde los talentos tiene oportunidades de estrenarse y ejercer sus capacidades. Gloria Cardona, coordinadora del Micro Teatro afirma: “Es una verdadera escuela para los actores, escritores y realizadores y es una nueva manera de gozar el teatro para el público que comparte esta experiencia.”
La lista de obras que se han llevado a cabo en estas temporadas es larga. Recordamos “Tango for Men”, interpretado por David Chocarro, o “Luv Bytes”, realizada recientemente por Sara Linares.
Sara Linares, joven actriz española y americana, debuto en el Micro Teatro CCE con la obra “Luv Bytes” y me explica: “Esta obra me hizo pensar en mi generación que ha nacido con la tecnología y está integrada a las redes sociales. Trata sobre el impacto de los celulares y la computación en nuestras vidas. Me gustaría tener relaciones cara a cara, no en una pantalla… pero mi generación vive otra realidad”.
Sandra Portal-Andrew coréografa cubano-colombiana, ha concebido “Luv Bytes”: “La tecnología- me dice- nos ha cambiado la forma de comunicarnos, ha cambiado nuestro relacionamiento. Ingerimos la tecnología como una comida que nos nutre o nos intoxica”.
En una noche tropical, entre palmeras y cerveza, el patio se ilumina y los contenedores se preparan para los mini-show. Por micrófono, nos anuncian la obra.
Miguel Sahid, de origen puertorriqueño, director y escritor, me saluda y me comenta que ha dirigido “La luna envidiosa” basada en Romeo y Julieta, por las celebraciones de Shakespeare, es una versión en inglés que recrea la famosa escena de amor, en el balcón.
Asimismo, me cuenta: “Iniciamos Micro Teatro para niños, que coordino. Es una oferta para toda la familia. Con obritas de diferentes temáticas, como: “El nombre de las Hadas”, “El pianista imaginario” y otras de autores de Miami y españoles. Los niños viven la experiencia del teatro, con sus padres y es una fiesta”.
Se acerca la actriz española Vanessa Conde, quien vive en Miami y adora el teatro griego; compartimos esa pasión, aunque el Micro Teatro sea la concepción opuesta. Me cuenta que ella trabaja en la obra “Flexi sexual”, del dramaturgo Josep María Miró, en la sección Golfa, a partir de las 11 de la noche: “Yo, ya hice Micro Teatro en España, pero para mi, es una vivencia diferente hacer teatro en Miami”.
Llaman por el micrófono: “Las manos de Lady Macbeth”, nos apresuramos al contenedor número 3 para tomar asiento en el diminuto recinto donde hay una mesa con vajilla roja y grandes cuchillos. “Soy Yani Martín, la actriz que interpreta Lady Macbeth” –vestida de blanco, Yani me introduce al actor Lester Martínez, quien me presenta al director Leopoldo Morales. Morales me explica: “Esta es una propuesta minimalista, con un texto no realista, adherido al movimiento posmodernista, por lo tanto la puesta respeta el texto”.
Hablamos, enseguida, con la escritora Nitsy Grau, quien me comenta: “La idea de esta breve obra es hacer un cuestionamiento de la mujer trayendo el personaje de Lady MacBeth, de Shakespeare. Es una relectura donde se cuestiona el rol de la mujer, la relación con el hombre, y su posición como personaje secundario en la historia”.
Después de bañarnos con la sangre de Lady Macbeth tomamos una cerveza y nos acercamos a hablar con Alberto Mateo, director de la próxima obra que veremos: “Habitación 1616”. Alberto, famoso en Miami por encarnar la “Mala Suerte” en un comercial, me recuerda: “He actuado en Micro Teatro en cuatro obras y he dirigido tres. Es un trabajo de experimentación interesante para los que estamos en el mundo teatral. Ahora, voy a debutar como escritor con una obra sobre los niños transgénero, que ya estoy preparando, para el próximo espectáculo”.
La obra “Habitación 1616” es del autor español Roberto García Encina, trata sobre el supuesto encuentro de Cervantes y Shakespeare en una cama de hotel. Carlos Anzalotta, representa a Shakespeare: “Me encanta trabajar en Micro Teatro por la libertad creativa”. El actor Omar Nassar interpreta a Cervantes, y la obra alude al 1616, fecha de la muerte de ambos; es una propuesta con humor, no exenta de irreverencia y recuerdos.
Silvia de Esteban fue una famosa modelo y miss España pero ama las tablas y lleva varias temporadas con el Micro Teatro: “Es un escaparate importante para trabajar y conocer a la gente del ambiente”. Se luce como actriz, cantante, productora y directora, ejerciendo el abanico de posibilidades que da esta fórmula teatral alternativa y, de alguna manera, mágica.
Mágica porque nuevos talentos se descubren y crean, casi sin recursos, el encanto del teatro. Conversamos con el actor argentino Diego Masri quien, junto al actor venezolano Pedro Pablo Porras, interpretan la obra del autor español J.M.Miró “Villa Cariño”.
“Es una viviencia muy enriquecedora tanto para los actores como para los espectadores – me indica Diego- y también una escuela de teatro donde te fogueas. Un gran idea que pica y se extiende”.
Deseamos que el Micro Teatro del Centro Cultural Español se extienda y nos regale buenos textos, buenos actores y puestas novedosas para revivir el teatro.
Y decimos con Barrault ¡Viva el teatro!