Aunque la tecnología ha evolucionado mucho, algunos componentes se han quedado un tanto atrás. Un buen ejemplo lo encontramos en las baterías de nuestros teléfonos móviles y tablets; aunque es innegable que duran más que antes, con un uso intensivo es raro que puedan aguantar horas.
Es aquí cuando aparece la batería solar portátil como una interesante alternativa que nos permitirá incrementar la autonomía de la batería interna de cualquier dispositivo de una forma importante.
Si todavía no las conoces, tendrás muchas dudas sobre ellas. Hemos preparado este artículo en donde analizamos sus principales particularidades.
¿Qué son las baterías portátiles solares?
Las baterías portátiles solares, también conocidas como power bank solar, es un dispositivo que se utiliza para recargar otros sin necesidad de conectarlos a la corriente eléctrica.
Se confeccionan con pequeñas placas solares que tienen la capacidad de atraer y utilizar la energía que viene de los rayos del sol. Por ello es un dispositivo interesante, ya que no será necesario utilizar una fuente de corriente para poder proceder con su recarga.
¿Es realmente interesante contar con una Power Bank Solar? Es muy recomendable para todos aquellos que viajen sin parar y para quienes quieran vivir aventuras al aire libre. Sin embargo, teniendo en cuenta que utilizamos nuestros teléfonos móviles para todo (como puede ser para estudiar, para trabajar, para consultar nuestras redes sociales, o simplemente para comunicarnos), también es un dispositivo perfecto para cualquier persona.
La forma de recarga es exponer la pequeña placa que lleva al sol. Esto puede llevarnos a pensar que tan solo funcionará cuando hace sol, pero realmente no es así. También pueden funcionar los días que hace menos sol, o que está nublado… Sin embargo, habrá que considerar que la carga será mucho más lenta.
Pero también se pueden cargar con la red eléctrica, de la misma forma que haríamos con una power bank sencilla.
¿Es lo mismo un cargador solar que una power bank solar?
Si ya conoces los cargadores solares, es posible que los confundas con el concepto de power bank solar, incluso hasta puedes pensar que se trata de lo mismo, solo que dicho de otra manera.
La verdad es que su función es bastante similar. Ahora bien, las baterías son portátiles, con la capacidad de almacenar la energía que les llega desde el sol, aunque también se pueden cargar a través de la red eléctrica.
En cambio, un cargador solar no tiene una batería interna ni nada que se le parezca. Su único cometido será actuar de intermediario entre el sol y el dispositivo que se quiere cargar. Es decir, que captan la energía y la mueven al dispositivo en cuestión, pero en ningún caso la pueden acumular para utilizarla más tarde.
Una vez que dejan de tener contacto con el sol, los cargadores solares no servirán para nada.
En este sentido, las baterías solares portátiles resultan mucho más versátiles.
Factores a tener en cuenta para comprar una batería solar portátil
Ahora que ya conoces las principales particularidades de la batería solar portátil, seguramente estarás pensando en tener una.
Con tan solo hacer una rápida búsqueda en el mercado descubriremos que no son precisamente pocas las opciones que se nos presentan. Para evitar comprar un dispositivo que no nos interese, existen una serie de factores a través de los que nos podemos guiar.
En este apartado hemos confeccionado una práctica guía de compra para elegir una batería solar portátil.
1. Autonomía o capacidad de la batería
La autonomía o capacidad de la batería es un criterio clave no solo a la hora de elegir una batería solar portátil, sino cuando se quiere comprar cualquier tipo de batería.
Este factor se mide en miliamperios o mAh. Lo más lógico es pensar que, a mayor cantidad de mAh, mayor será la capacidad de carga, pero también influye la tecnología con la que se haya diseñado la batería.
Para que tengas un valor de referencia te recomendamos invertir en un modelo que tenga, como mínimo, unos 10.000 mAh. Con este valor podrás hacer unas cinco cargas a tu teléfono móvil y dos cargas a una tablet.
Así que también es importante saber el uso que se le va a dar al dispositivo antes de hacer nuestra elección.
2. Ubicación de las placas integradas
Ten en cuenta que la energía va a entrar en la batería a través de la placa o placas solares integradas. Así que es muy importante revisar la ubicación de las mismas, para determinar si la marca la ha diseñado de una forma lógica.
Lo interesante es que estén dispuestas en las zonas más largas de la batería, ya que así podrán aprovechar al máximo la luz solar.
Desconfía de todas aquellas baterías cuyas placas integradas sean muy pequeñas, o que estén colocadas en lugares que no parezcan demasiado lógicos.
3. Protecciones
Por mucho que llevemos cuidado con la batería, en cualquier momento podemos tener un descuido y se puede dar un buen golpe. Si no queremos que se estropee a la primera de cambio, debemos revisar las protecciones.
Las mejores baterías llevan unas óptimas protecciones que protegerán de prácticamente todo (incluso pueden darle una cierta resistencia al agua) … aunque el precio también podría dispararse.
Lo interesante sería conseguir una buena relación entre un modelo que nos ofrezca materiales de gran calidad, y que estén disponible a un precio ajustado.
4. Tamaño y peso
Además de los criterios anteriores, las dimensiones y el peso también se consideran criterios clave para elegir una buena batería portátil (la propia palabra de portátil lo dice todo ¿no?).
Si la vas a llevar en tus excursiones, de viaje, al trabajo, o a cualquier otro lugar, tendrás que revisar si te cabe en la maleta.
Lo mismo pasa con el peso: si es demasiado pesada es probable que resulte un fastidio moverla y al final la dejes en casa.
Considera estos cuatro factores y podrás hacerte con una batería solar portátil que se ajuste a lo que buscas.