El conjunto arquitectónico Medina Azahara, situado en la provincia de Córdoba, ya es patrimonio mundial de la Unesco por conservar intacta en su ciudad los restos del período del siglo X cuando en el califato omeya de Córdoba fue proclamado el occidente islámico.
Tras la deliberación del comité, Medina Azahara se suma a su listado de bienes, la ciudad que fue testigo de los omeyas como civilización cultural y en donde se desarrollo la civilización islámica occidental que llegó a Europa y fundó Al-Andalus.
Córdoba es desde hoy, la única ciudad del mundo con cuatro declaraciones de protección por parte de la Unesco; la mezquita-catedral, el casco histórico y la fiesta de los Patios, elegida hace tan solo seis años.
La extensión de 112 hectáreas amuralladas la convierte sin duda en el mayor conjunto arquitectónico del país. La ciudad construída en el año 936 por la dinastía occidental omeya, sería la sede del Califato de Córdoba. Según cita la leyenda, fue un regalo de Abderramán III a su enamorada Azahara que nunca llegó a apreciarla aunque este se desviviera plantando almendros en flor. Aunque los arqueólogos reniegan de esta teoría amorosa, lo cierto es que para él era la ciudad que brillaba por sí misma.
La historia sí ha verificado que el califa realmente mostró al mundo su superioridad y la grandeza que duró poco dado que la guerra civil con los bereberes de Sulaimán al Mustain la destruyeron en 1010. El saqueo de Medina Azahara acabó en Granada, Sevilla e incluso en la misma ciudad de Córdoba y no fue hasta el siglo XIX cuando se identificaron las ruínas a pocos kilómetros de la ciudad.
El lugar de encuentro de occidente y oriente, ejemplo de convivencia, ha sido finalmente reconocida por la Unesco, añadía la vicepresidenta Carmen Calvo, cordobesa, que no ocultaba su alegría. España es ahora el tercer país del mundo y segundo de Europa con más lugares inscritos, un total de 46, por detrás de China e Italia.
El Instituto municipal de Córdoba ha reclamado que dado que ha sido valorado por la Unesco se potencien las excavaciones en el lugar para ver qué hay detrás del yacimiento que aún sigue oculto por las tierras en donde existe cerca de un 90 % de secretos por descubrir; una ciudad que fue destruida y que hoy brilla con luz propia de nuevo.