Este miércoles 28 de febrero de 2024, Yulia Navalnaia, la viuda de Alexei Navalny, ha pronunciado un discurso de diez minutos ante el Parlamento Europeo de Estrasbuego, en el que ha recordado a su esposo –«un inventor que siempre tenía ideas nuevas»-, fallecido repentinamente el 16 de este mes en la Colonia Penitenciaria del Artico, donde cumplia condena de diecinueve años por «extremismo», y cuyo funeral está previsto que se celebre el próximo viernes, una vez que las autoridades rusas han devuelto a su madre el cuerpo del difunto.
«No sé si las exequias se celebrarán de forma pacífica o si la policía decidirá detener a quienes acudan a despedir a mi marido», ha dicho Yulia Navalnaia, tras acusar a Vladimir Putin de «matar» a su marido: «Por orden suya, a Alexei le han torturado durante tres años. Le han hecho pasar hambre en una pequeña celda de cemento (…) y después le han matado. Luego, han maltratado su cuerpo y han maltratado a su madre (…) Este asesinato público ha demostrado a todo el mundo que Putin es capaz de todo».
Los diputados europeos en pie han aplaudido el final del discurso, en el que Yulia Navalnaia ha dicho que el presidente ruso es «un bandido que tiene sangre en las manos» y «el jefe de una organización criminal».
Tras la muerte de Alexei Navalny, su viuda, de 47 años, quien ya estuvo hace una semana denunciando a Vladimir Putin ante el Consejo Europeo, y después se ha entrevistado en Washington con Joe Biden, ha manifestado que piensa continuar su combate, aunque no entraba en sus planes y se ha visto forzada a hacerlo por los útimos acontecimientos.
Inmediatamente después de su muerte, Yulia Navalnaia publicó una foto en Instagram, en la que estaba besando a Alexei en la frente, con la leyenda «Te amo». Su historia de amor ha durado veintiséis años. Nacida en Moscú en 1976, conoció al joven abogado que sería su marido en una localidad de veraneo turca. Se casaron en 2000, el mismo año que Putin llegó por primera vez al gobierno de la Federación de Rusia.
Disidente, Alexei Navalny creó en 2011 una primera Fundación contra la corrupción, contando siempre con el apoyo político de su esposa, quien limitaba sus apariciones a las manifestaciones y campañas electorales. Comenzó a dar entrevistas en los medios cuando, en 2013, Alexei fue detenido: «Comparto sus convicciones y lo imagino como presidente», dijo en el canal de televisión Dojd, añadiendo que, desde muy pequeña, su hija Dasha decía que su padre trabajaba «luchando contra los estafadores».
Cuando, en 2020, Alexey Navalny perdió el conocimiento en un vuelo, tras haber sido envenenado con Novitchock, una sustancia neurotóxica, y el avión hizo un aterrizaje de emergencia en Omsk, Yulia Navalnania «removió cielo y tierra para conseguir trasladarle a Alemania para que le trataran y escribió un correo electrónico a Vladimir Putin para que autorizara el viaje», según informaba a principios de esta semana el canal público francetvinfo.fr. Una vez en Europa, estuvo todo el tiempo a su lado y juntos escuchaban la canción Perfect Day, de Duran Duran (…) El 16 de enero de 2021 la pareja voló a Moscú en un avión lleno de periodistas, y Alexei fue detenido nada más bajar, en el aeropuerto de Moscú- Cheremetievo. Esa fue la última vez que Yulia Navalnaia vio a su marido en libertad. Pocos días más tarde, a ella también la detuvieron en una manifestación de apoyo al disidente, aunque inmediatamente la soltaron.
Durante estos años, ha publicado en las redes selfies de su marido en la cárcel y se ha marchado repetidamente de Moscú para llamar la atención de la comunidad internacional. En marzo de 2023, cuando llevaba más de un año sin ver a su marido, asistió en Hollywood a la ceremonia de los Oscar, donde la película «Navalny» recibió el Premio al Mejor Documental.
«Con la muerte del opositor –sigue la información de francetvinfo- la suerte de Yulia Navalnaia se puede comparar ahora a la de Svetlana Tikhanovskaia, propulsada al frente de la oposición bielorrusa tras el encarcelamiento de su marido Sergueï Tikhanovski en mayo de 2020. Condenadas al exilio, ambas mujeres se han encontrado a puerta cerrada, sin que se haya desvelado el contenido de sus conversaciones (…) En junio de 2023, la televisión Russia Today, citando fuentes de las fuerzas del orden, aseguraba que Yulia Navalnaia sería detenida si regresaba para asistir al juicio de su marido».
Los medios internacionales hacen referencia estos días a la campaña de descrédito lanzada por el Kremlin contra la viuda de Alexei Navalny: Telegram, Pravda y otros medios digitales están difundiendo rumores y falsas informaciones sobre una supuesta infidelidad, y también aseguran que se habría negado a ver a su marido en la cárcel.
En las últimas semanas, Yulia Navalnaia ha apoyado públicamente a Boris Nadejdine, un político liberal cuya candidatura a la elección presidencial del próximo mes ha sido anulada por las autoridades.
