Rodada en el desierto de Almería, como los westerns de los ’70, “Zona hostil” es una de guerra “a la española” dice la publicidad, que por lo visto es algo que marca la diferencia, protagonizada por Ariadna Gil (“Vivir es fácil con los ojos cerrados”), Roberto Álamo (“La gran familia española”), Raúl Mérida (“Que Dios nos perdone”) y Antonio Garrido (“Fin”, “Los protegidos”), y dirigida por Adolfo Martínez, un debutante en la dirección que viene de hacer carrera en Estados Unidos participando, no se especifica en calidad de qué, en producciones como “El libro de la selva” o “Terminator Salvation”.
“Zona hostil” es una película de acción basada en una misión de rescate liderada por el equipo médico del ejército español en Afganistán: en 2012, un helicóptero medicalizado (Medevac) volcó al tocar tierra cuando iba a rescatar a dos soldados estadounidenses que habían resultados heridos en un incidente de carreta. Un segundo transporte aéreo acudió al rescate del grupo, atrapado en un valle rodeado de pequeñas alturas dominadas por los talibanes, dicen en el guión.
La película, que está dedicada a las fuerzas armadas españolas, recrea las 15 horas de combate que duró el rescate entre piedras y polvo, que corresponden al desierto de Tabernas, y los cinco helicópteros –tres de carga y dos de ataque- prestados por el ejército, que también se encargó del adiestramiento de los actores, proporcionándoles una formación militar básica y de manejo del armamento. El coronel Allué, quien en 2005 fue jefe del contingente español en la guerra de Afganistán, ha sido el asesor de una película cuya protagonista principal es la capitana Varela, interpretada por Ariadna Gil.
Mucha acción, mucho movimiento, carreras precipitadas, unos cuantos disparos y un misil, algo de sangre y mucho polvo pegado en los rostros de los actores, con el resultado de una más de guerra, ni buena ni mala sino todo lo contrario, porque en algunos momentos la acción resulta muy confusa y los personajes se diluyen en la polvareda.