Dos premios para “El invierno” del argentino Emiliano Torres
El jurado presidido por el director danés Billy August ha galardonado a la película china “Yo no soy Madame Bovary” (Wo bu shi pan jinlian) de Feng Xiogang con la Concha de oro de la 64 edición del Festival de cine de San Sebastián. Su protagonista la popular actriz china Fan Binbing se alza por su parte con el premio a la mejor interpretación femenina.
Película china que en sesiones de prensa tuvo una acogida mitigada, libre adaptación de Madame Bovary, cuenta la historia de una mujer que reclama de las autoridades chinas que anulen su divorcio por ser falso, ya que era una mentira montada con su esposo para obtener un piso mejor, mientras que su marido aprovecha la situación parea irse con otra.
En su tratamiento Xiogang oscila entre el drama y la comedia negra, y en su realización utiliza el artificio, muy de moda últimamente, de filmar con varios formatos: el ojo de Buey o formato circular, la pantalla cuadrada y la pantalla completa según el lugar en que transcurre la acción.
La Concha de oro al mejor director ha sido para el coreano Hong Sang-soo por su película “Your self and yours”, cineasta autor muy apreciado en los festivales de cine, que retrata a menudo la vida cotidiana y las relaciones humanas en su país. En esa línea se sitúa también esta película, que habla del tema de la pareja, a través del personaje de un pintor que intenta recuperar a su pareja, una mujer propensa al alcohol y que sale con otros hombres. Una mirada pretendidamente irónica sobre los intelectuales coreanos, según declara el director.
La que era mi favorita en esta selección oficial, la película argentina “El invierno” de Emiliano Torres se lleva dos premios: el de mejor fotografía y un premio especial del jurado, aunque extrañamente compartido ex equo con la película sueca “Gigante” (Jatten) de Johannes Nyholm. Premio de compromiso reflejo probablemente de fuertes divergencias entre los miembros de ese jurado internacional del que formaban parte también la productora española Esther García, el director chino Jia Zhang Ke, o la directora argentina Anahi Berneri.
El premio al mejor actor se lo lleva, y es merecido, el formidable actor catalán Eduard Fernández por su interpretación del espía Francisco Paesa en “El hombre de las mil caras”, del director Alberto Rodríguez.
Más absurdo me parece en cambio el premio al mejor guion para la película española “Que Dios nos perdone” de Rodrigo Sorogoyen, una historia de sicópata violador de ancianas, con un policía tartamudo y otro bestial, más cerca de un guión de telefilm estilo serie americana que de un buena película policiaca. El bruto, el tartamudo y el malo podría ser también el título de este thriller espagueti, genero que queda por inventar. Dicho esto, todos mis respetos a los dos actores principales: Antonio de la Torre, convincente en su brutalidad, y Roberto Álamo al que se le entiende mal con ese tartamudeo que el guion ha impuesto a su personaje de improbable investigador de la brigada de homicidios.
En Horizontes Latinos hubo una mención especial para “Alba” de la ecuatoriana Ana Cristina Barragán, y el gran premio dotado con 35 mil euros fue para la chilena “Rara” de Pepa San Martín. Dos premios bien merecidos que no podemos sino saludar en el marco de una muy buena cosecha de cine latinoamericano en esta 64 edición. El denominador común de estas películas, ambas son operas primas, es que cuentan historias relatadas desde el punto de vista de dos niñas adolescentes y su entrada en la pubertad con dos temas y tratamientos muy distintos.
Señalemos también que la excelente “Lady Macbeth” del británico William Oldroyd que se fue de vacío en el Palmarés oficial, ha sido galardonada sin embargo con el premio de la Fipresci, Federación de la Crítica Internacional.
El premio del jurado la juventud coincidió con el premio Otra mirada de TVE y fue para la película israelí “Bar Bahar” de Maysaloun Haoud. El premio del público ha sido en cambio para el británico Ken Loach por “Yo soy Daniel Blake” ya galardonado en Cannes con la Palma de oro. El premio Nuevos realizadores a la mejor opera prima del festival ha sido para “Park”de la griega Sofia Exarchou, una coproducción greco polaca, con una vigorosa mirada sobre los efectos de la crisis que ha arruinado a Grecia en estos últimos años.