Un estudiante saharaui, Abdul Rahim Badri, de 24 años, fue asesinado tras unos enfrentamientos con armas blancas ocurridos entre grupos amazigh (bereberes) y saharauis en la facultad de Letras de la Universidad Ibn Zohr de Agadir.
Según diferentes fuentes el joven murió debido a las graves heridas infringidas tras ser ingresado en las Urgencias del hospital Hasán II de Agadir. Estudiantes saharauis que señalaron al fallecido como defensor del Frente Polisario denunciaron el retraso en llegar la asistencia sanitaria y la ambulancia para su traslado.
El Colectivo de Estudiantes Saharauis acusó al grupo de estudiantes bereberes de fuerza de choque de las autoridades para reprimir el activismo saharaui en el seno de la Universidad.
Las fuerzas del orden intervinieron para parar la lucha y dispersar a los estudiantes. Las autoridades anunciaron una investigación para «determinar las circunstancias del incidente e identificar las personas implicadas en la muerte de la víctima».
También la policía ha rodeado la morgue donde se encuentra el cadáver mientras sus compañeros saharauis han pedido una investigación sobre esta muerte con participación de asociaciones de derechos humanos internacionales. Hubo posteriormente concentraciones de protesta por la muerte del estudiante en El Aaiún, Smara y Tan Tan, reprimidas por la policía.
El enfrentamiento entre los estudiantes saharauis y amazigh coincidió con un día de exámenes. En este caso se produjeron este sábado, tercer día del Ramadán, pero venían precedidos días atrás de otros choques entre los grupos y con la policía.
De hecho, el pasado día 10 se produjeron manifestaciones en la Universidad por parte de estudiantes saharauis en Agadir con motivo del 45 aniversario de la creación del Frente Polisario, lo que motivó diferentes enfrentamientos con la policía. Entre los participantes en esa concentración se encontraba el estudiante asesinado.
Hay que recordar que en el Sahara no hay Universidad y los estudiantes saharauis se ven obligados a desplazarse sufriendo fuertes discriminaciones en las universidades marroquíes al delatar su acento hassania –distinto al dariya que se habla en Marruecos- denunciando la represión e intimidación practicada por el régimen.
No es la primera vez que ocurren estos enfrentamientos; en enero de 2016 se produjeron otros similares entre grupos bereberes y saharauis en la misma universidad y en la de Marraquech que terminaron con la muerte de dos estudiantes.
En el caso de Marraquech, un total de quince estudiantes saharauis fueron condenados a penas de entre tres y diez años de cárcel por su implicación en la muerte de un estudiante bereber.
La universidad Ibn Zohr de Agadir se creó en 1989 y cuenta con más de 75 000 alumnos, además es la que más estudiantes saharauis acoge y la que más estudiantes de Filología Española tiene de todo Marruecos, unos 700 según cifras de hace dos años.