Según los informes preliminares, más de 60 000 personas necesitan ayuda alimentaria en las islas Abaco y en Gran Bahama. Las agencias de Naciones Unidas ya tienen personal en el país y están evaluando las necesidades de la población tras el paso del huracán de categoría cinco, la tercera tormenta de alto impacto que azota al país.
La Oficina de la ONU sobre asuntos humanitarios (OCHA) ha asegurado que las consecuencias en Las Bahamas son “catastróficas” tras el paso del Huracán Dorian, que aún continúa afectando al país.
Dorian tocó tierra este fin de semana en el Cayo Elbow de las islas Abaco, y ahora permanece en Gran Bahama, donde viven unas 51 000 personas, que sufren las consecuencias de las inundaciones masivas y fuertes vientos.
El Primer Ministro ha confirmado que al menos cinco personas han muerto, y la Cruz Roja Internacional calcula que unas 30 000 habrían sido directamente afectadas y 13 000 viviendas destruidas.
“Nuestras evaluaciones sugieren que el agua potable será una necesidad prioritaria debido al estado del sistema de suministro y la alta probabilidad de intromisión de agua salada provocada por las inundaciones. También se espera un fuerte impacto en las comunicaciones, la energía y el transporte. Los datos disponibles también sugieren la necesidad de asistencia humanitaria en forma de alimentos, refugio y recuperación temprana”, aseguró el portavoz de OCHA, Jens Laerke.
El representante de la Cruz Roja aseguró que Abaco tiene la población más vulnerable, con una gran comunidad de migrantes haitianos que necesitarán acceso a agua potable.
Los equipos de la ONU, junto con la Agencia de Manejo de Emergencias por Desastres del Caribe, se encuentran en la isla de Nassau, la capital de las Bahamas, y están a la espera de poder desplegarse en la zona de desastre una vez reciban autorización gubernamental.
Por su parte el, el Programa Mundial de Alimentos cree que será necesaria comida para más de 60 000 personas en esa zona (14 000 en Abaco y 47 000 en Gran Bahama), pero aún no se ha completado la evaluación preliminar.
Dorian: un huracán debilitado, pero aún peligroso
La Organización Meteorológica Mundial ha confirmado que Dorian se ha debilitado a huracán de categoría tres pero mantiene vientos de hasta 195 kilómetros por hora.
“Lo extraordinario de Dorian es que es estacionario. Esto significa que los impactos de los vientos, la lluvia y la marejada se concentran más en un área. Desde que tocó tierra en la isla Gran Bahama, Dorian solo ha viajado alrededor de 64 kilómetros”, explicó a periodistas en Ginebra la portavoz Claire Nullis.
Las previsiones son que se dirija a Florida y se acerque a Georgia y Carolina del Sur, por lo que las autoridades estadounidenses han informado a la población de que, independientemente de la trayectoria exacta del pronóstico, es probable que Dorian produzca fuertes vientos y una marejada ciclónica potencialmente mortal desde la Florida hasta las Carolinas.
En respuesta a la «tormenta sin precedentes», la representante especial del Secretario General para la Reducción del Riesgo de Desastres, Mami Mizutori, expresó sus condolencias al pueblo de las Bahamas. «Este es el cuarto año consecutivo que presenciamos una temporada de huracanes en el Atlántico extremadamente devastadora que incluye huracanes de categoría 5 como Dorian», dijo el portavoz Denis McClean de la Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres (UNISDR).
«La secuencia de los acontecimientos no puede separarse del hecho de que estos últimos cinco años han sido los más calurosos jamás registrados debido al aumento continuo de gases de efecto invernadero en la atmósfera».
En vísperas de la Cumbre de Acción Climática de la ONU en Nueva York el 23 de septiembre, McClean señaló que «el huracán Dorian es una muestra de la amenaza existencial de la emergencia climática para los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo».
Se trata de un enorme desafío humanitario y de desarrollo para las Bahamas. En los últimos años, el país se ha visto seriamente afectado por al menos tres huracanes importantes, todas tormentas de categoría 4 o más. “El impacto de los huracanes Joaquín, Matthew e Irma en las Bahamas ha costado aproximadamente 820 millones de dólares”, dijo.