Lleva tres semanas entre la vida y la muerte. Ryma Anane, 28 años, argelina, se encuentra desde hace pocos días en la Unidad de Quemados del Hospital La Paz, al norte de Madrid.
Llegó allí el viernes 14 de octubre tras ser atendida en el Centre Hospitalier Universitaire de Tizi-Ouzou (Tizi-Uzu), capital de la región beréber de Cabilia. Esta joven profesora da clases de francés en la escuela privada Assalas, de esa ciudad.
A primera hora del lunes 26 de septiembre, Ryma salió muy temprano de su domicilio hacia la cercana parada de autobús de la pequeña localidad en la que vive con su familia. Ese día iba sola, aunque normalmente lo hace acompañada de otras tres chicas.
De repente, un tipo la roció de gasolina antes de arrojarle un mechero encendido. El agresor huyó de inmediato. Las llamas prendieron con rapidez pero logró regresar a casa, donde sus también aterrorizados familiares apagaron las llamas con mantas y agua.
Según cita el diario digital Tout sur l’Algérie, su familia pudo distinguir entre el terror y su balbuceo la frase siguiente: «¡Ha quemado mi futuro!».
Tras un rastreo policial infructuoso, el agresor se sintió acorralado y decidió entregarse. Se trata de un vecino que pretendía casarse con Ryma Anane desde hacía dos o tres años. Al verse rechazado, anunció que la mataría si sospechaba que iba a casarse con otro.
El hermano de Ryma ha dicho que había obtenido una beca para seguir estudios en Francia. Según la familia, pidieron su ingreso en el hospital de Saint-Louis (París), que reclamó el pago previo de 316.000 euros por una estimación anticipada de setenta días de hospitalización, antes de gestionar el visado correspondiente.
Tras la implicación de otra institución argelina (ABM International), que organiza traslados de enfermos graves hacia Francia, Turquía y España, los médicos consideraron que debía ser transferida a París o a Madrid para salvar su vida.
Su ingreso en el hospital madrileño La Paz tuvo lugar tras obtener rápidamente un visado de las autoridades españolas y después de que la familia supiera que no le exigirían el pago anticipado del tratamiento, que en España –además- se estima menos costoso que en Francia. La familia de Anane ha pedido ayuda para pagar los –aproximadamente– cien mil euros que podría costar el tratamiento en España
Por el momento, se sabe que las quemaduras afectan al sesenta por ciento del cuerpo, sobre todo a la nuca y espalda de la víctima de este atentado machista que ha conmocionado a toda Argelia.
Por fortuna, parece que el rostro de Ryma no sufrió quemadura alguna. El lunes se supo que se encuentra estable y que en Madrid está acompañada por su hermano Abdesalam Anane.
En el portal Féminicides Algérie los datos no están actualizados, pero se citan este año 32 feminicidios (hasta finales de agosto de 2022), es decir, que no consta aún el de Ryma Anane. El último crimen machista reseñado en esa página digital es el de Samia Djemoui, de cuarenta años, quien fue asesinada al recibir un golpe en la cabeza por parte de su marido, quien después estranguló a los tres hijos de ambos.
En una información publicada por RTVE nuestra colega Ebbaba Hameida hace un relato preciso en el que se subraya que el de Ryma no es un caso aislado. Muchas jóvenes argelinas son asesinadas o maltratadas después de rechazar un matrimonio o por pedir el divorcio: «Cuando el asesino sabe que ya no puede controlar a esa mujer, que no puede ser ‘suya’ es cuando dice lo de ‘vas a ser mía o no vas a ser de nadie’. Que se traduce en ‘serás mía o mereces la muerte’».
Tras el asesinato o el intento de homicidio, como en este caso, no faltan los sectores machistas tradicionales que intentan culpar a las propias víctimas.